A pocos días de haber sido condecorado con la medalla de la Orden del Imperio Británico (OBE) por sus servicios a las relaciones entre Reino Unido y Argentina, el empresario Eduardo Eurnekian recibió el desaire de los kelpers, quienes le hicieron saber que no podrá ser enterrado en Malvinas, como es su deseo.
PUERTO ARGENTINO.- En 2004, Eurnekian mandó erigir el cenotafio con los 649 nombres de los caídos durante la guerra. Rehabilitó el antiguo cementerio que había sido construido bajo la supervisión de la Comisión de Guerra de la Commonwealth después de que el coronel británico Geoffrey Cardozo recogiera los cuerpos de los soldados de los campos de batalla. Y convirtió esas sencillas tumbas en un gran monumento para honrar a los combatientes.
Según expresó días atrás, Eduardo Eurnekian quería ser enterrado en Armenia con sus familiares. Pero un día, al visitar el cementerio argentino en la Isla Soledad, vio una tumba vacía. Preguntó qué había sucedido y le dijeron que los restos del soldado sepultado ahí habían sido trasladados de regreso a su ciudad natal. “En esa tumba vacía, quiero que me entierren”, dijo Eurnekian.
No obstante, según informa el semanario Pengüin News en su último ejemplar, desde el ilegítimo gobierno británico en Malvinas se confirmó que ello no será posible ni tampoco permitido.
“El cementerio próximo a Darwin fue construido específicamente para ser el último lugar de descanso para los miembros de las fuerzas armadas argentinas tras la finalización de la guerra. Por eso y tal es común con otros cementerios militares, no se permiten entierros adicionales, incluyendo familiares, en tumbas de guerra, ya que están son expresamente para sepultar los muertos en guerras”.
El vocero del ilegítimo gobierno agregó que si bien los esfuerzos del Sr. Eurnekian para financiar el cementerio militar argentino y el apoyo a los familiares para que visiten Malvinas y oren junto a las tumbas de sus seres queridos “son bien conocidos y fueron reconocidos con el otorgamiento de un OBE, en la Lista de Honores Especiales 2020 de la Reina, el caso sería igual para cualquiera que hiciera una solicitud desde cualquier país”.
“El cementerio es específicamente para tumbas de guerra y también funciona como memorial para todos aquellos que perdieron sus vidas entre el 2 de abril y el 14 de junio de 1982”, dijo el vocero, agregando que donde está instalado el cementerio son tierras de Falklands Landholdings y “por extensión, imagino, el control recae sobre el gobierno de las Falklands”.