Los Pumas alcanzaron la segunda semifinal de su historia

CARDIFF, REINO UNIDO (AFP).– Argentina clasificó por segunda vez a unas semifinales de un Mundial de rugby tras ganar a Irlanda (43-20) ayer en el Millennium de Cardiff. Los Pumas, que se colocaron pronto con una ventaja de 17-0, sufrieron en el segundo tiempo cuando su rival se acercó (20-17), pero marcaron la diferencia en la parte final.

La selección albiceleste se medirá en semifinales, el 25 de octubre en Twickenham, a Australia, que venció con apuros ayer a Escocia (35-34).

Los Pumas mostraron una gran emoción, con lágrimas de sus jugadores antes del partido y del seleccionador Daniel Hourcade tras el triunfo.

Argentina, valiéndose de sus wing explosivos, Santiago Cordero y Juan Imhoff, dinamitó el inicio del partido, y a los diez minutos había hecho callar a las gradas del Millennium, mayoritariamente teñidas de verde de las camisetas de los aficionados irlandeses.

El centro Matías Moroni (3) y el wing Juan Imhoff (10), con un pase al ángulo derecho y una patada hacia adelante, colocaron un 14-0, casi definitivo, con la ayuda de un Nicolás Sánchez infalible, que anotó las dos conversiones.

Cuando peor lo estaba pasando Argentina en el segundo tiempo, con Irlanda acercándose peligrosamente en el marcador, sacó de la galera a sus backs mágicos, y los tries de Joaquín Tuculet (69) y el segundo de Imhoff (73) resolvieron el partido.

 

Pie de Sánchez y tries de Imhoff

Si Nicolás Sánchez, declarado mejor jugador del partido, que estuvo casi infalible, con cuatro conversiones y cinco penales, se colocó líder en la clasificación de goleadores del Mundial (74 puntos), Imhoff alargó a siete su récord de tries de un jugador argentino en la historia del torneo, cuatro en la presente edición.

El peor momento de Argentina llegó cuando Irlanda aprovechó la superioridad numérica por la expulsión temporal de diez minutos del pilar Ramiro Herrera (18), logrando sus diez primeros puntos, con un penal del apertura Ian Madigan (20) y un try de Luke Fitzgerald (26), pasando de un cómo 17-0 a un peligroso 20-10.

El inicio del segundo tiempo fue inquietante para Argentina que vio como el tercera línea Jordi Murphy, nacido en Barcelona, apoyaba un try (44), que con la conversión de Madigan, acercaba a Irlanda en el marcador (20-17).

Dos penales de Sánchez (51) y Madigan (53) permitían mantener el suspenso (23-20).

Cuando parecía que Argentina, nervioso e indisciplinado, sería superado en cualquier momento por Irlanda, un penal de Sánchez (64), permitió a los Pumas respirar (26-20).

A partir de ahí Argentina se rehizo y llegaron los tries demoledores de Tuculet e Imhoff.

El capitán de la selección argentina, Agustín Creevy, expresó su alegría: “Se siente una gran felicidad. No sé cómo explicarlo. Se llevaba esperando mucho tiempo un momento así y todavía no caigo. Es un sueño para mí. Llevábamos mucho trabajando, pero no somos solo los jugadores. Hay un staff que estudia muchas cosas toda la semana, el equipo médico. Los chicos que quedaron fuera. Es de todos. Es del rugby argentino”.

Los Pumas derrotaron a Irlanda y jugarán en semifinales ante Australia, que eliminó a Escocia.
Los Pumas derrotaron a Irlanda y jugarán en semifinales ante Australia, que eliminó a Escocia.