BUENOS AIRES (NA).- El presidente Mauricio Macri lanzó ayer durante un acto en el Museo Casa Rosada un fuerte mensaje a “jueces, sindicalistas y empresarios” al resaltar que “el poder” lo tienen “los ciudadanos” que eligen “servidores públicos, como el que les habla”.
“El cambio tiene que ver con avanzar, tampoco desde la política, o desde la dirigencia, porque también puede pasar entre los empresarios, sindicalistas y los jueces. Nadie puede creerse dueño de decirnos lo que tenemos que hacer”, advirtió el Presidente en el discurso que pronunció tras asistir al tedeum en la Catedral porteña.
El mandatario se expresó así luego de reivindicar a los próceres de la Revolución de Mayo como un “conjunto de mujeres y hombres” que “tuvieron un coraje terrible y buscaron ser libres”, y añadió: “Querían libertad política y económica. Un poco, 200 años después, se nos repite la historia”.
“Los ciudadanos somos los que tenemos el poder y elegimos servidores públicos, como el que les habla, para que nos ayuden a trabajar y a desarrollar y a superar las dificultades”, continuó el jefe de Estado en el inicio de un locro en el Museo Casa Rosada, adonde asistieron funcionarios del Gabinete, ONGs y alumnos de escuelas públicas.
Y en la misma línea, añadió: “Hoy, en el Día de la Patria, les digo que vamos por el camino correcto, pero lo tenemos que hacer juntos. Esta no es una tarea de un Presidente, de un Gobierno o de unos pocos”.
Al evento asistieron, entre otros, el jefe de gabinete Marcos Peña; los ministros de Interior, Rogelio Frigerio; de Educación, Esteban Bullrich; y de Agroindustria, Ricardo Buryaillle.
Más temprano, el mandatario se refirió en declaraciones a Canal 13 al lanzamiento de la alianza entre los líderes del Frente Renovador, Sergio Massa, y del GEN, Margarita Stolbizer, y a la entrevista televisiva que brindará la expresidenta Cristina Kirchner.
“Lo importante es que aporten ideas para esta Argentina en la que que se vive con esperanzas”, sostuvo Macri, quien destacó que “el mundo” recibe a la Argentina “con un enorme entusiasmo y ganas de participar” y los dirigentes políticos tiene que “demostrar ideas, coherencia”.
Y agregó: “Así que espero que todos los que se sumen bienvenidos a aportar ideas sobre la base de construir verdad, porque no nos podemos seguir engañando más. Hay mucha gente que la está pasando mal por la cual estoy dejando todo lo que puedo todos los días y espero que todo el mundo que tiene responsabilidades en la Argentina haga lo mismo”.
Por otra parte, aseguró que está “bien” de salud, luego de la descompensación que sufrió en Ecuador, adonde viajó para asistir a la ceremonia de asunción del presidente de ese país, Lenín Moreno, el último miércoles.
“Estoy bien, fue una descompensación por la altura, tal vez el cansancio acumulado por el viaje por Asia. Fue un momento feo, pero nada grave”, sostuvo el jefe de Estado momentos antes de participar de la ceremonia que encabezó en la Catedral el arzobispo porteño, Mario Poli.
TEDEUM
Poli: “La inequidad genera violencias”
BUENOS AIRES (NA).- Ante el presidente Mauricio Macri, el arzobispo porteño, Mario Poli, advirtió ayer en la ceremonia del tedeum que “la inequidad genera violencias” y pidió “soluciones” al Estado porque “buena parte del pueblo no posee igualdad de oportunidades y carece de lo necesario para una vida digna”.
Durante la ceremonia en la Catedral porteña, en el marco del aniversario número 207 de la Revolución de Mayo, el cardenal primado de la Argentina también aludió a la cantidad de personas que están debajo del índice de pobreza, que según el Indec es un 30,3 por ciento de la población, y alertó sobre la “deuda social interna”.
Ante el Presidente y los ministros del Gabinete, el representante eclesiástico señaló que “dolorosamente” los argentinos aprendieron que “la inequidad genera violencias” y aclaró: “Si bien las soluciones demandan, en primer lugar, la intervención de las instituciones del Estado, de igual modo nadie puede sentirse excluido de hacer algo por el prójimo”.
En ese sentido, hizo una alusión a la normalización de las cifras del Indec y señaló: “Las estadísticas veraces son muy buenas porque nos advierten dónde estamos parados y nos animan a encarar soluciones. No obstante, los porcentajes invisibilizan el dolor de las familias que sufren la postergación y el desánimo”.
Al respecto, el arzobispo de Buenos Aires sostuvo que “eso sólo se supera por la cercanía fraterna y cordial de otro argentino”, manifestó el cardenal, al tiempo que indicó que “no existe realidad humana y social que no pueda ser redimida, cambiada para bien. Dejémonos interpelar por la realidad humana que vivimos”.
