BUENOS AIRES.- Tras aprobar los distintos ciclos de instrucción y los requisitos exigidos por la Fuerza, más de 150 hombres y mujeres que se desempeñaban como soldados voluntarios del Ejército lucen ahora orgullosos sus insignias de cabo e inician su carrera profesional como suboficiales.
La ceremonia, celebrada en el salón de actos de la Escuela de Suboficiales del Ejército “Sargento Cabral”, fue presidida por el director general de Educación, general de brigada Agustín Humberto Cejas acompañado por el director de la escuela “Sargento Cabral”, coronel Jorge Alberto Puebla. Después del saludo de las autoridades, la banda militar “Combate de San Lorenzo” interpreto las notas del Himno Nacional y el obispo castrense monseñor Santiago Olivera realizó una invocación religiosa y bendijo los despachos y premios que fueron entregados.
Se dio lectura a la resolución del jefe del Ejército, teniente general Pasqualini, por la cual se promueve al grado de cabo “en comisión” y cabo artículo 11 al personal de suboficiales recientemente egresado. Seguidamente, el coronel Puebla hizo uso de la palabra para referirse a la ceremonia en donde felicitó al personal agasajado y resaltó la importancia y la historia del suboficial dentro del Ejército. Al finalizar, el general Cejas les tomó el juramento de fidelidad a la Constitución Nacional.
A continuación, se procedió a la entrega de los despachos a los nuevos suboficiales, en primer lugar lo recibieron dos cabos que egresaron con el más alto promedio general dentro de sus respectivos escalafones, para luego dar paso los demás egresados. También se entregaron los premios al personal que se destacó durante la cursada.