BUENOS AIRES (NA).- Lucas Matthysse tuvo una deslucida actuación y cayó sin atenuantes ante la leyenda filipina Manny Pacquiao, que le ganó por nocaut técnico en el séptimo round y le arrebató el título wélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en Malasia.
Matthysse, que volvió a decepcionar en una oportunidad histórica, fue superado en todos los rounds y recibió dos conteos por caídas, en el tercer y el quinto round, antes de ser derribado con un preciso uppercut de izquierda por el veterano filipino, que demostró estar totalmente en forma para completar una tarea sin baches.
Desde el comienzo de la pelea, desatollada en Kuala Lumpur, se vio a un Pacquiao, que pese a sus 39 años, superaba con sus piernas y su combinaciones al púgil chubutense, que pareció salir a especular y a esperar colocar la mano potente que lo salvó en peleas anteriores de las paradas difíciles.
Pero el acierto nunca llegó, continuó el dominio total del filipino, que tuvo un acierto en el tercero y mandó a la lona al chubutense en el tercer round.
“Entraba y salía y nada salió como quería”, se confesó ante la televisación oficial Matthysse después de la pelea.
Pacquiao dominó toda la pelea con su movilidad y su jab de derecha, que hizo tanto daño en el argentino, al que con el paso del tiempo sólo le quedaba la chance de la mano salvadora.
En final del sexto round, el boxeador argentino dio rodilla en tierra, sin recibir golpe, al parecer para detener el castigo y respirar, por lo que el árbitro le dio el segundo conteo.
La historia tuvo el final en la séptima vuelta que parecía caer de maduro: en medio de una combinación, el peleador filipino levantó el uppercut y Matthysse cayó en muy mal estado, al punto que el árbitro no dudó en determinar el nocaut técnico, una decisión que pareció atinada.- .
Tras la estrepitosa caída y una carrera con 39 victorias y cinco derrotas, Matthysse, a los 35 años, admitió la posibilidad de retirarse de los rings.
“Creo que llegué a lo más alto que puede llegar un boxeador y enfrenté a uno de los mejores boxeadores de la historia. Ahora voy a descansar y ver si sigo, o digo hasta acá llegué”, admitió el argentino.
En torno a la pelea, elogió a su rival, al que definió como “una leyenda y una gran campeón” y le quitó dramatismo al desarrollo: “Se gana y se pierde, y hoy me tocó perder”, reflexionó.