Soy Margarita Maldonado, nací en el año 1956. Hija de Herminia Vera y de José Darío Maldonado.
Mamá nació en la estancia Viamonte en el año 1922. Hija de madre selk´nam, Illogen, y padre chileno, Antonio Vera Mayorga.
Mamá queda sin su madre al año y 40 días, quedando al cuidado de Santiago Rupatini y otros selk´nam que estaban en la estancia. A los pocos años lo trasladan al puesto “Entre Ríos”, quedando mi madre nuevamente a cuidado de otra mujer selk´nam.
A los pocos años el abuelo la lleva a Punta Arenas a estudiar y al no encontrarse bien, ella pide volver, cuestión que mi abuelo la interna en la Misión Salesiana, donde por primera vez conoce a sus hermanos Alejandro y Nolberto, quedando allí hasta los 19 años.
(Ella solía decir: “lloré todas las noches a escondidas de mi papá, ya que extrañaba mi vida en la Misión Salesiana”).
Al llegar a nuestro pueblo se vuelve encontrar con mi padre, poniéndose de novios; cosa que a mi abuelo no le agrada, ya que a mi viejo le gustaban las fiestas nocturnas.
Ella estaba muy enamorada así que decide casarse, la ceremonia fue en la Iglesia de la Misión Salesiana. Ella siempre trabajó de empleada doméstica. Una MUJER, que dejó un legado enorme con su presencia, su amor y resistencia que la vida le dio. Hablar de ella sería escribir un libro…
Dejando más de 200 y tantos retoños.
José Darío Maldonado, mi padre: Nació en la Isla Huar- Chile en el año 1916.
Llegó a la Tierra del Fuego, a la ciudad de Ushuaia, a los 17 años, trasladándose a nuestra ciudad en corto tiempo. Venía de Puerto Montt dejando a mis abuelos solos ya que él era hijo único. Ellos sufrieron mucho por su partida.
Una anécdota que contaba siempre mamá, y es que papá la llevó a visitar a los abuelos con mi hermana Luisa (Cuqui) y Gloria (Nona) a Puerto Montt.
Viajaron en barco. Papá les había dicho a ellos que se había casado con una india, entonces mi abuelo buscaba a una india con chicos, pasando al lado de mi madre sin conocerla, hasta que llegó mi padre y le dijo “ella es mi esposa”.
Mi abuelo Víctor Manuel quiso que fuera marino como él, enviándolo de cadete a San José de Mariquina. Una comuna perteneciente a la provincia de Valdivia – Chile, situada en el extremo noroeste de la Región de los Ríos. Cosa que a mi padre no le gustó y abandonó.
Al llegar a Río Grande se dedicó a trabajar de su profesión: Mecánico. Trabajó también en la Usina con Pínola y Martínez. Pasó por muchos lugares, entre esos la Misión Salesiana donde por primera vez mi madre lo conoció.
Mi padre tocaba la guitarra, acordeón y armónica. Solía visitar los bares que en esos años estaban de moda e interpretaba esta canción donde después fue apodado y conocido por “Pajarillo”. (Gorrioncillo de pecho amarillo).
Se vuelve a encontrar con mi madre y se casan, formando una familia de 10 hijos, 6 mujeres y 4 varones; 9 nacidos en Río Grande y una en Puerto Montt. 2 nacieron en la casa Bilbao, 7 en el batallón de Infantería número 5.
Mucho de mi padre no puedo contar ya que era una persona enferma por el alcohol.
Recuerdos de mi padre… pocos. Solía imitar animales y hacer reír a sus nietos, pero fueron muy pocos recuerdos, más tristes que alegres, tanto para mí y mis hermanos, como para mi madre.
Se separaron cuando mamá tenía 46 años. Siendo nosotros, los 10 hijos, quienes, a pedido de mamá, nos hicimos cargo de él y lo cuidamos hasta que falleció a los 68 años en nuestra tierra.
Continúo fortaleciendo la herencia cultural de Herminia Vera Illogen Alkan.
Muy linda historia. Gracias por compartirla.