BUENOS AIRES (NA).– El entrenador de fútbol Reinaldo Carlos Merlo reconoció ayer haberse “asustado un poquito” por el infarto que sufrió días a atrás, por lo que los médicos tuvieron que colocarle un stent en un sanatorio porteño.
Tras recibir el alta, Mostaza contó que en primera instancia pensó “que era una gastritis” por lo que tomó “unos medicamentos” y como no se iba el dolor, fue a la clínica y en un par de horas estaba en el quirófano.
En declaraciones formuladas a TyC Sports, Merlo agradeció: “A los amigos y a la gente que me dio cariño. No me asusté, bah, en verdad sí me asusté un poquito”.
Mostaza fue dado de alta este martes por la tarde luego de las operaciones en las que le ubicaron prótesis vasculares para ensanchar los conductos de circulación sanguínea porque tenía dos venas tapadas en un 70 por ciento.
El entrenador de 67 años sufrió un infarto en su domicilio y fue internado en el Sanatorio de los Arcos, en el centro porteño.
Merlo, que hasta este episodio no había tenido antecedentes cardíacos, participó ayer de la semana pasada en una charla en un programa de radio en horas de la tarde y tenía planificado ir a comer con amigos, pero sintió un fuerte dolor en el pecho.
Por eso, decidió ir al centro de salud, donde decidieron dejarlo internado y comprobaron que había tenido un infarto.
Merlo, ídolo de Racing al conseguir el título de campeón en 2001 tras 35 años de sequía de la institución de Avellaneda, tuvo su último trabajo en el fútbol de Ecuador, en Fuerza Amarilla.
Como futbolista, Mostaza jugó toda la vida en River, entre 1969 y 1984, siempre como mediocampista central.
Como DT, tiene una larga trayectoria que incluyó repetir pasos por Racing y River, aunque en los últimos tiempos había tenido pasos por el Ascenso y por clubes de menor envergadura.