Cada 24 de marzo se conmemora en nuestro país el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia para recordar a las víctimas de la última dictadura militar, proceso que se inició el 24 de marzo de 1976 a través de un golpe de Estado que depuso al gobierno constitucional de María Estela Martínez de Perón.
RIO GRANDE.- En un escenario especial, sin actos públicos, se recuerda hoy un aniversario más del golpe militar que eliminó los derechos civiles y dejó 30 mil desaparecidos en la República Argentina.
Esta conmemoración fue establecida en el año 2002 por Ley de la Nación N° 25.633, en cuyo artículo 2 se establece que: “En el seno del Consejo Federal de Cultura y Educación, el Ministerio de Educación de la Nación y las autoridades educativas de las distintas jurisdicciones acordarán la inclusión en los respectivos calendarios escolares de jornadas alusivas al Día Nacional instituido por el artículo anterior, que consoliden la memoria colectiva de la sociedad, generen sentimientos opuestos a todo tipo de autoritarismo y auspicien la defensa permanente del Estado de Derecho y la plena vigencia de los Derechos Humanos”.
El 24 de marzo de 1976 las fuerzas armadas depusieron al gobierno de María Estela Martínez de Perón e instalaron en su lugar un gobierno de facto conocido como la junta militar, gobernada por los comandantes de las tres fuerzas armadas: Jorge R. Videla (Ejército), Emilio E. Massera (Armada) y Orlando R. Agosti (Fuerza Aérea).
Una vez en el poder, los militares iniciaron lo que llamaron “el Proceso de Reorganización Nacional”, que consistía en una ofensiva militar contra la guerrilla, iniciándose así una etapa oscura y muy dolorosa en nuestro país.
El gobierno militar persiguió, detuvo, interrogó, torturó y ejecutó a 30 mil personas. Algunos eran guerrilleros, otros colaboradores, otros tan sólo estaban contra el golpe, y otros tantos eran simples civiles que no tenían relación alguna con la guerrilla.
Se instalaron los centros clandestinos de detención. Allí, llegaba mucha gente, muchos de ellos se convirtieron en “desaparecidos”. Asesinados, enterrados en fosas comunes o hasta arrojados al mar en aviones de las fuerzas armadas. Una etapa de muerte, que duele hasta el día de hoy.
Los militares justificaron este accionar por fuera de la ley diciendo que “el orden democrático no servía para restablecer la paz”. Disolvieron el Congreso, establecieron la pena de muerte para los subversivos, suspendieron las libertades ciudadanas, removieron a la Corte Suprema de Justicia, intervinieron los sindicatos obreros y las universidades, proscribieron las actividades partidarias, y crearon un órgano de censura para todo tipo de medios de comunicación.
Del otro lado, miles de familias perdieron a sus hijos, esposos, nietos, amigos. Fueron siete años de dictadura donde aún al día de hoy no se sabe con exactitud la cantidad de desaparecidos. Organismos de derechos humanos cuentan 30 mil desaparecidos, entre los que se cuentan unos 500 niños, que eran adoptados ilegalmente luego de nacer en los centros de detención.
Ya en 1982 el gobierno militar no podía sostenerse y llegaron las protestas para buscar poner punto final a esta era del horror. Pero fue la absurda guerra de Malvinas la que precipitó la caída del gobierno de facto.
El 30 de octubre de 1983 se llamó a elecciones, y el 10 de diciembre volvió la democracia a la Argentina.
El juicio a las Juntas Militares iniciado por orden del presidente Raúl Alfonsín, no tuvo precedentes en la historia del mundo y sus resultados fueron la base para los avances judiciales que sobrevinieron y también las resistencias a través de sublevaciones militares.
Pocos años después, las leyes de punto final (1986) y de obediencia debida (1987), de Alfonsín, y luego los indultos de Carlos Menem (1990) dieron marcha atrás con esta proceso de Memoria, Verdad y Justicia, que volvió a abrirse con la presidencia de Néstor Kirchner, quien promovió la derogación de las leyes del perdón.
En 2005, la Corte Suprema de Justicia declaró la inconstitucionalidad de la leyes de impunidad, se reabrieron las causas por delitos de lesa humanidad durante la dictadura militar y ya hay más de 400 genocidas condenados y juicios en curso.
Organizaciones de Derechos Humanos realizarán actividades a distancia
BUENOS AIRES (NA).- Las agrupaciones de Derechos Humanos conmemorarán el Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia sin las tradicionales movilizaciones y con actividades a distancia, a raíz del brote de coronavirus que impide que puedan realizarse reuniones en el espacio público.
Abuelas y Madres de Plaza de Mayor suspendieron la marcha por el centro porteño que realizan cada 24 de marzo ante el pedido del Gobierno de evitar la aglomeraciones, mientras que la agrupaciones que integran el Espacio Memoria, Verdad y Justicia hicieron unos días más tarde.
Los dos colectivos tomaron la decisión antes de que el Gobierno declarara el aislamiento obligatorio, por lo que se dispusieron a organizar actividades alternativas para conmemorar el 44 aniversario del último golpe de Estado y recordar a las víctimas de la dictadura.
Abuelas de Plaza de Mayo, juntos a Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, HIJOS, Familiares de Desaparecidos y el CELS, entre otros organismos, convocaron a un “pañuelazo blanco”, para compartir en redes sociales fotos de pañuelos de ese color colocados en balcones, puertas o ventanas.
Y se pide que las imágenes sean compartidas utilizando las etiquetas #PañuelosConMemoria #24M #44AñosDelGolpe #Son30000 #MemoriaVerdadYJusticia, entre otros.
A las 19:30 del martes habrá una transmisión web en la cual se dará lectura a un documento de los organismos de Derechos Humanos leída por representantes de las organizaciones convocantes.
Por su parte, el Espacio Memoria llamó a realizar un “proyectorazo”, que consistirá en compartir proyecciones a través de las redes sociales a partir de la noche de este 23 de marzo a las 21:00 hasta las 23:59 del 24 de marzo.
La agrupación invita a descargar imágenes de su sitio web (www.espaciomemoria.ar/proyectorazo) y que las personas que posean un proyector las reflejen, desde los balcones, ventanas y terrazas, en las paredes de la ciudad donde se encuentren.
La idea es que las personas que participen compartan la actividad en sus redes sociales con los hashtag #ProyectamosMemoria #son30mil #MemoriaVerdadJusticia.