Pablo Moyano considera que el tiempo del que disponía el Gobierno para hacer una oferta a los gremios ya está agotado, y que llegó el momento de la confrontación en la calle.
BUENOS AIRES (NA).- El secretario adjunto del sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, amenazó ayer con romper la CGT si la central obrera no convoca a un paro general más allá que el Gobierno apruebe o no un bono navideño.
El camionero disparó con dureza contra el triunvirato conformado por Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña al sostener que la conducción de la CGT «no tuvo huevos para pararle al Gobierno».
Con fuertes críticas, el sindicalista advirtió que «si acepta un bonito o maquillaje» a cambio de desactivar el paro que impulsan otros sectores del movimiento obrero, «no tendría sentido seguir» en esa central.
De esta manera, Moyano agitó las aguas de una CGT que ya venía revuelta a raíz de las distintas visiones sobre cómo plantarse frente al Gobierno en el actual contexto de conflictividad social y laboral.
Las facciones debaten si seguir en una tesitura conciliadora a la espera de alguna respuesta parcial como un bono de fin de año, o bien dar por terminada la mesa de negociación y llamar a una huelga general que reclame medidas más de fondo como la reapertura de paritarias.
Claramente, Pablo Moyano se sitúa en este último grupo, que considera que el tiempo del que disponía el Gobierno para hacer una oferta a los gremios ya está agotado, y que llegó el momento de la confrontación en la calle.
«La CGT no tuvo huevos para pararle al Gobierno. Si la CGT acepta un bonito o maquillaje, no tiene sentido seguir en un espacio donde no se defienden los intereses de los trabajadores», aseguró el secretario adjunto de Camioneros en declaraciones a radio Del Plata.
«Si no hay una definición concreta, no tendría sentido seguir en la CGT. Nos quedaremos en el gremio y que siga la CGT con sus reclamos», amenazó.