Las opiniones de quienes viven en Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur tuvieron su espacio en la Audiencia de la región Patagonia organizada por la Defensoría del Púbico, que duró más de siete horas y media.
USHUAIA.- Durante la tercera Audiencia Pública del año organizada por la Defensoría del Público para la región Patagonia expusieron 50 personas quienes se refirieron al rol que tuvieron las radios comunitarias y alternativas en pandemia y la necesidad de incorporar perspectiva de géneros en medios audiovisuales. Aunque una de las principales preocupaciones de la audiencia fue, sin dudas, la conectividad a internet. Horacio Avendaño, desde Comodoro Rivadavia, miembro de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, aseguró: “Somos la región del país con menor conectividad”.
“Estamos para escucharlos y escucharlas, para que nos hagan llegar sus ideas y propuestas. Con estos insumos vamos a diseñar políticas públicas”, aseguró en la apertura la defensora del Público, Miriam Lewin.
Luego de las palabras de Gustavo Bulla, coordinador de las Audiencias Públicas de la Defensoría, llegó un momento especial para esta cita federal.
En la apertura, desde la Base Antártica Carlini, tuvieron la palabra el jefe militar de la Base, Mayor Fernando Ezequiel Sosa, y el licenciado en Oceanografía, Eduardo Ruiz Barlett.
Sobre el acceso a la información, el Mayor contó que en 2013 se instaló una antena de televisión de ARSAT que les permite acceder a los canales de aire que mantienen informado al personal. Con la instalación de esa antena se mejoró el ancho de banda de Internet, lo que les permite acceder a todos los servicios que la web ofrece. Y también detalló que la Base Esperanza tiene una repetidora de Radio Nacional.
“Valoro especialmente el trabajo de esta Defensoría para dar lugar al reclamo de las audiencias que fueron expuestas a cientos de operaciones de desinformación en esta pandemia”, sintetizó Alfredo Luenzo, senador nacional por Chubut.
Con el paso de la jornada y las diferentes exposiciones de las oradoras y los oradores, surgieron más temáticas desarrolladas, el acceso deficitario de la región a internet, la mirada adultocéntrica de los medios que atenta contra la niñez y la juventud, el federalismo comunicacional, estereotipos y discriminación, la falta de producción local -el término más utilizado fue “medios porteñocéntricos”-, la urgencia económica de los medios comunitarios y la estigmatización que padecen los pueblos originarios.
“En la primera etapa de la pandemia se estigmatizó en medios a niños/as como hipercontagiadores”, destacó Marisa Graham, defensora de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación.
Además, se reclamó una mayor agilización en la entrega de los Fondos de Fomento Concursables para Medios de Comunicación Audiovisual (FOMECA) y la creación de nuevos programas y políticas de concursos que apoyen a los medios alternativos, indígenas y comunitarios.
“Muchos medios sostuvieron relatos falsos que promovieron el odio y el racismo hacia el pueblo mapuche”, expresó María Nahuel, de lof Lafken Winkul Mapu. Mientras que Valeria Car, de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, detalló: “Hay una mirada porteñocéntrica del tratamiento de las noticias de pandemia y pospandemia. E interpretaciones alarmistas y necesidad de impactar”.
También se profundizó sobre las lógicas de producción que no reflejan diversidades en los contenidos, ya que se repiten discursos hegemónicos y así se evidencia que la comunicación sigue siendo centralizada.
Se recalcó el eje primordial que tuvieron las radios alternativas en la distribución de contenidos, ya que “la radio sigue siendo lo que más se escucha en zonas donde no hay conectividad” y se remarcaron las vulneraciones que se producen desde los medios hegemónicos.
La falta de programación local y la ausencia de personas no binarias trabajando en la mayoría de las zonas del sur del país también fue subrayado durante la Audiencia. Como el nulo espacio de mujeres conduciendo programas políticos.