La rosarina Nadia Podoroska y el porteño Diego Schwartzman, ambos apodados “Peque” por sus bajas estaturas, lograron ayer dar un paso más en su inolvidable camino en Roland Garros al acceder a los cuartos de final, y mantienen encendida la esperanza argentina en el certamen.
BUENOS AIRES (NA).- Podoroska, la primera argentina en octavos de final en nueve años, se impuso en la cancha “Simonne Mathieu”, la tercera en importancia del complejo ubicado en el barrio parisino de Bois de Boulogne, en una remontada espectacular ante la checa Barbora Krejcíkova con parciales de 2-6, 6-2 y 6-3.
La rosarina de 23 años, actual 131 del ranking mundial pero que ya aseguró su presencia entre las 70 mejores de la WTA, batalló durante poco más de dos horas para lograr su séptimo triunfo consecutivo en el polvo de ladrillo parisino, ya que los primeros tres fueron en la clasificación al cuadro principal.
Podoroska, campeona panamericana en Lima y representante de la Argentina en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio, espera en cuartos de final a la ucraniana Elina Svitolina (6°), que este domingo se impuso a la francesa Caroline García por 6-1 y 6-3.
El “Peque”, de 28 años, que venía de vencer el viernes al eslovaco Norbert Gombos (106) por 7-6 (3), 6-3 y 6-3 para clasificarse a los octavos de final, continúa sin ceder un set en el certamen, dado que le ganó este domingo a Sonego con parciales de 6-1, 6-3 y 6-4.
Ahora, Schwartzman enfrentará al austríaco Dominic Thiem, número 3 del mundo y reciente campeón del US Open, que venció al joven francés Hugo Gaston -campeón olímpico juvenil en Buenos Aires 2018- por 6-4, 6-4, 5-7, 3-6 y 6-3.
El porteño buscará mantener su buen ritmo de juego, que ya lo había llevado a la final del reciente Masters 1000 de Roma, cuando dispute por cuarta vez los cuartos de final de un Grand Slam, ronda que no ha logrado superar.