Luis Adrián Gallardo Soto (49) guiaba un auto completamente alcoholizado, con una graduación de 3,28 g/l de alcohol en sangre y fue protagonista de una persecución policial que terminó con una colisión que afectó a un patrullero de la Policía de la Provincia.
RIO GRANDE.- El hecho sucedió éste sábado a las 5:00 cuando personal policial que realizaba una recorrida de prevención a bordo de un patrullero pudo observar que un Volkswagen Gol circulaba en contramano por la calle Fagnano.
Los efectivos hicieron señales con las luces del móvil para ordenar la detención del auto, pero el conductor lejos de responder a lo solicitado por la Policía, emprendió una rápida huida doblando hacia calle Bilbao donde siguió avanzando por algunas cuadras, hasta que se detuvo de manera brusca en la intersección con la calle Estrada.
La repentina detención del Gol hizo que el conductor del patrullero no pudiera evitar chocarlo desde atrás ya que, a pesar de frenar de lleno, el móvil siguió su curso debido al estado resbaladizo de la calzada. Como consecuencia del impacto el auto oficial quedó con serios daños en todo su frente.
En la intersección de Estrada y Bilbao la Policía procedió a la aprehensión de Luis Adrián Gallardo Soto, quien evidenciaba estar bajo los efectos del alcohol, lo que más tarde pudo ser confirmado con la realización de la alcoholemia la que arrojo una alta graduación.
Por este hecho se dispuso el inicio de una causa judicial por flagrancia, calificando al delito de “Resistencia a la autoridad”, por lo que en las próximas horas el imputado deberá comparecer para ser indagado y sujeto a proceso por el hecho protagonizado.