El domingo se produjo el deceso de Salvador Guarrera quien, durante 50 años, perteneció a las filas de los Bomberos Voluntarios de Ushuaia, llegando a ser Jefe de Cuerpo y Presidente de la Asociación de Bomberos.
USHUAIA.- La Federación de Bomberos Voluntarios de Tierra del Fuego lamentó la pérdida física de Salvador Guarrera, quien falleció el domingo, causando una enorme conmoción en los cuarteles de toda la provincia debido a su amplia trayectoria en ese servicio solidario, al cual le dedicó 50 años de su vida.
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Desde la Federación expresaron su acompañamiento a la Comunidad de Bomberos Voluntarios de Ushuaia, así como a familiares y amigos de Salvador Guarrera.
“La historia lo posiciona como un pilar fundamental en la trayectoria de los Bomberos Voluntarios de Ushuaia, así como en la provincia en su conjunto. Su paso como Jefe de Cuerpo y Presidente de la Asociación de Bomberos, junto con casi cinco décadas de dedicación constante, lo convierten en una verdadera leyenda cuyos logros hablan por sí solos”, indicaron en un comunicado.
La Federación indicó que “el legado de Salvador impactará y servirá de inspiración para las generaciones venideras, quienes podrán conocer su historia, su liderazgo y su honradez como atributos de un ser único e irrepetible”.
En tanto, los Bomberos Voluntarios de Ushuaia, también brindaron testimonio del dolor que les causa la pérdida física del Comandante en Retiro Salvador Guarrera, considerando que “nos dejó una verdadera leyenda de los Bomberos Voluntarios”.
En un comunicado difundido en las redes sociales, expresaron:
Salvador fue un pilar fundamental en nuestra institución, destacándose por su historia, trayectoria y liderazgo. Supo ocupar lugares memorables dentro de nuestra organización, desempeñándose como Jefe de Cuerpo y presidente de la Honorable Comisión Directiva, además de ser reconocido como ciudadano destacado por la municipalidad de Ushuaia, entre otras distinciones.
Con su partida, Salvador deja un vacío imposible de llenar. Su legado está marcado por invaluables valores como la sabiduría, la pasión, el compañerismo y la dedicación, siendo un verdadero servidor público por naturaleza.
Ingresó a las filas del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Ushuaia en 1975, alcanzando su primer ascenso como Bombero Voluntario. A lo largo de los años, su dedicación fue constante, enfrentando épocas difíciles y de crecimiento institucional. En 2004, pasó al Cuerpo de Reserva, donde cumplía el rol de Jefe de Cuerpo. Durante décadas en la línea de acción, siguió acompañando en la toma de decisiones de la Honorable Comisión Directiva, donde también fue Presidente. Su integridad, determinación y convicción lo convirtieron en un ser admirable, repleto de sabiduría y anécdotas.
Hoy, Salvador nos deja un legado invaluable. Su presencia será recordada como el ejemplo de trabajo constante, motivación y liderazgo. Su legado perdurará como la esencia misma de las buenas acciones y la honradez en las próximas generaciones.