La obra fue compuesta en el paso internacional Monte Aymond. El impresionante mural sobre la gesta de Malvinas mide 12 metros de ancho por cuatro de alto y transmite el sentimiento malvinero de la región austral y el respeto hacia quienes dieron su vida por defenderlas.
RIO GALLEGOS.- Todo comenzó el 15 de abril, cuando Ismael Castro asumió como coordinador de Centros de Frontera Integración Austral y entre sus objetivos pensó en la puesta en valor del edificio. Se contactó con el Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas «Soldado José Honorio Ortega» y así llegaron al argentino Jonathan Garbero, y a la panameña, Mayka Mendizabal, artistas que se abocaron al proyecto de un mural.
«Le dimos una idea de los que queríamos, él tomó todas las imágenes, las islas Malvinas, un soldado, una mujer, un avión, el crucero, soldados», contó el presidente del Centro de VGM, Fernando Alturria.
«Estamos demostrando que las Malvinas están en el corazón de los argentinos. En el extremo más austral del continente habrá un mural que todos van a ver y al ser tan grande, los extranjeros van a decir así que los argentinos realmente quieren a las islas», expresó Alturria y agregó «vamos a demostrarle al mundo que tenemos presentes a las Malvinas y que vamos a seguir luchando hasta que vuelva a flamear nuestra bandera en el territorio donde nunca tuvo que ser arriada».
Garbero lleva ya 16 años dedicándose al arte. Varios de los trabajos de este artista nacido en Mendoza, pero criado en Río Gallegos, pueden ser observados en diferentes puntos de la ciudad. En la intersección de las calles Alvear y Chaco se encuentra el de Mujeres Argentinas, con las imágenes de Mercedes Sosa, Gilda, «Tita» Merello y María Gabriela Epumer, mientras que el de José Saracano alegra el patio del gimnasio del Colegio Salesiano.
Este es el tercer mural de Garbero sobre la guerra, anteriormente realizó uno por pedido de un veterano de guerra y otro solicitado por el Municipio.
Al muralista Malvinas lo toca de cerca, ya que perdió a dos tíos que eran aviadores y murieron en la guerra. Uno de ellos fue el teniente Jorge Ricardo Farías, quien cayó en combate el 9 de mayo de 1982.
El mural en el que, junto a Mendizabal, ha trabajado durante poco más de un mes, tiene 4 metros de alto por 12 de ancho. Dada su altura y ubicación, las condiciones del tiempo son una condicionante para completar los trabajos. De hecho, el jueves sólo restaban unos detalles para su finalización, lo cual no fue posible por el viento.
Si bien la obra aún no está terminada, ya impacta a quienes la han visto de cerca. «Un señor que fue a Malvinas estaba muy emocionado, varios camioneros son de Malvinas», comentó Jonatan Garbero y resaltó que el mensaje que quiere dejar es «nuestros héroes siempre serán recordados».
«Este mural es el primero a nivel nacional en una frontera argentina, me encantaría que se replique en todos los centros de frontera del país», sostuvo Ismael Castro a este medio.»Es para transmitir a todo el mundo que nuestro reclamo por Malvinas está vivo, digo el mundo porque transitan personas de todo el mundo por esta frontera. Además, reconoce a aquellos héroes que con valor defendieron nuestro territorio», cerró