“Pocas horas y pocos días de clase, eso es lo que vamos a ampliar”

La propuesta de la cartera educativa consiste en aumentar la carga horaria agrandando el calendario, precisó la Secretaria de Educación de la Nación.

BUENOS AIRES (NA).- El 86% de los alumnos tiene hoy 4 horas de clase por día, si se saca el recreo y la hora de almuerzo, quedan poco más de 3 horas, justificó la propuesta de agrandar el calendario escolar la viceministra de Educación Silvina Gvirtz.

Gvirtz fue consultada sobre los resultados de las pruebas Aprender 2021 al respecto de la pobreza de aprendizajes, la Secretaria de Educación de la Nación señaló que se incrementó en un tercio en los países de ingreso bajo y mediano, donde se estima que el 70 % de los niños de 10 años no pueden comprender un texto simple.

Durante la entrevista realizada por el periodista Horacio Finoli en el programa “Ahora o nunca: el espacio de la Educación”, Gvirtz subrayó que esa es la prueba “que en todo el mundo la pandemia causó estragos educativos”.

A partir de septiembre/22 se entregarán dos libros de Literatura a niños de las salas de 3, 4 y 5 años; porque aunque parezca una verdad de Perogrullo no lo es: nadie aprende a leer sin libros.

Por unanimidad, se aprobó en el Consejo Federal de Educación (asamblea nacional de ministros del área) que los estudiantes tengan más horas de clase; hoy el 86 por ciento de los chicos del país, tiene apenas 4 horas de clases por día, si se saca recreo y hora de almuerzo, quedan 3 horas y monedas.

Hoy sabemos que lo que queremos es que lean y comprendan lo que lean.

A las escuelas privadas van los sectores menos carenciados, la desigualdad no se mide por no ser establecimientos públicos sino por el nivel socioeconómico de las familias.

Otra hubiera sido la situación si en la Argentina se hubiese continuado el programa “Conectar Igualdad”, que se cortó en el período 2015 a 2019, con las consecuencias que pudimos comprobar durante los años de la pandemia.

Los sectores de ingresos más bajos perdieron más aprendizaje que los de ingresos más altos que, indudablemente, tenían acceso a los avances de la tecnología.

Finalmente, ante una consulta, destacó que ni el gobierno nacional ni los provinciales estudian un acortamiento en la duración de la escuela secundaria, cuyos contenidos sí están siendo analizados “no como reforma, sino como mejora”.

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