RIO GRANDE.- Inesperadamente la organización de la prueba ciclística Río Grande-Tolhuin se vio en la obligación de posponer la misma en una semana debido a que a último momento la ambulancia contratada no pudo brindar sus servicios y no hubo tiempo de contratar otra, y como la seguridad de la carrera es primordial para el Club O’Higgins, decidieron montarla el domingo 20 de marzo.
La carrera de 100 kilómetros tenía más de ochenta corredores anotados y se esperaba una verdadera fiesta, sin embargo el viernes a las 16:00 la firma CEDMA, quien tiene convenido con la Agencia Municipal de Deportes, comunicó que su ambulancia había sufrido un desperfecto mecánico y que no iban a poder brindar sus servicios.
Pese a la voluntad de todos por salir a buscar un reemplazo, esto fue inútil, no hay tantas ambulancias en la ciudad, mucho menos de gobierno, y la otra firma privada que presta sus servicios en la ciudad no tiene convenio con el municipio local y los organizadores no estaban en condiciones de desembolsar más de $15.000 que es lo que vale tener una ambulancia seis horas en forma exclusiva.
Esta más que claro que en Tierra del Fuego se necesita del apoyo gubernamental para poder montar esta clase de eventos, caso contrario es imposible hacer deportes con responsabilidad -velar por la seguridad de los corredores-, por ello es importante lo que aporta la Agencia Municipal de Deportes desde hace años, y para esta carrera en particular se habían sumado la Municipalidad de Tolhuin y la Secretaría de Deportes de la Provincia, cada una aportando su granito de arena para que la competencia se pueda realizar sin ningún tipo de problemas.
La medida de posponer en una semana la competencia no fue tomada del todo bien por gran parte de los corredores, quienes no entendieron que fue por fuerza mayor y pensaron que se les habían faltado el respeto, sin embargo con el correr de las horas fueron entrando en razón que si algo hubo fue justamente respeto, no quisieron sacarlos a la ruta sin el elemento principal de seguridad, la ambulancia.
Rápidamente Alejandro Barría, responsable de la Subcomisión de Ciclismo del Club O’Higgins, se paseó por todos los medios periodísticos para informar de la suspensión de la prueba y lo más costoso fue comunicarse con los corredores chilenos quienes habían confirmado su participación y más allá que entendieron los pormenores, no se sabe si podrán estar el próximo fin de semana, y algo similar quizás también ocurra con corredores locales.
También es cierto que de los inscriptos no muchos eran de la categoría Mountain Bike, por lo que se espera que con una semana más de entrenamiento varios más se sumen a la carrera que quiere ser un clásico de la provincia, de hecho ya se pusieron en juego cuatro Copa Challenger para la misma, dos para ruta y dos para montaña y a diferencia de otras Copas, acá los corredores la deben ganar en dos oportunidades consecutivas o tres alternadas para llevárselas definitivamente a sus vitrinas.
La carrera mantendrá todo tal cual estaba planificado para éste domingo, es decir, comenzará a las 10:00 desde el puesto policial José Menéndez y tendrá como lugar de llegada el Polideportivo Ezequiel Rivero de Tolhuin, algo menos de 100 kilómetros que de todas maneras serán muy duros por los distintos tipos de relieves que se toparán los corredores a lo largo de todo el trayecto. Las inscripciones ahora se extenderán hasta el viernes venidero siempre en el local Everest Outdoors.
