El hecho ocurrió cuando el guardacostas PNA GC-67 Río Uruguay detectó, en proximidades de Punta Moat, cerca del límite internacional, una boya con línea de trampas para la captura de centolla que, por sus características y falta de identificación, indicaron ser ilegales.
USHUAIA.- Ante esto, se la extrajo del agua, logrando el secuestro de dos líneas de pesca de aproximadamente 200 metros cada una que contenían un total de 70 trampas centolleras, devolviendo a su hábitat natural más de 100 ejemplares de la especie centolla-centollón.
Cabe destacar que el procedimiento fue realizado en el marco de las patrullas de control de pesca y prevención de la contaminación que realiza la Prefectura Ushuaia en aguas jurisdiccionales argentinas del canal Beagle.
Lo secuestrado, que tiene un aforo de alrededor de 4 millones de pesos, fue puesto a disposición de la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Ambiente de la Provincia.