En 2019, un hombre que lesionó a su entonces pareja, fue condenado a dos años de prisión en suspenso. La “arrastró por el piso tirándole de los cabellos, mientras la golpeaba con un cinturón que poseía una hebilla metálica”, explicó el magistrado en su sentencia.
RÍO GRANDE.- Un hombre de 39 años fue condenado a dos años de prisión en suspenso, por el delito de lesiones leves calificadas que produjo a una mujer, ahora su expareja.
Así lo dispuso el Juzgado Correccional del Distrito Judicial Norte, a cargo del Dr. Martín Bramati, por este hecho de violencia de género, ocurrido el 3 de julio de 2019, del que resultó víctima la entonces pareja del condenado.
A través del proceso de Omisión de Debate, el magistrado ordenó al Servicio Penitenciario la liberación inmediata del condenado, pues se encontraba privado de su libertad en la Unidad de Detención N° 1 de esta ciudad.
El liberado ahora deberá cumplir con pautas de conducta, como comunicar al Tribunal de Ejecución todo cambio de residencia que efectuare; someterse al cuidado del Patronato de Liberados; abstenerse de tomar contacto directo o por cualquier otro medio (telefónico o electrónico) con su expareja, como así también de concurrir a su domicilio, lugar de trabajo o estudio, en un radio de cuatrocientos (400) metros; y abstenerse de abusar de estupefacientes y de bebidas alcohólicas.
Además el juez Bramati dispuso que el condenado inicie inmediatamente un tratamiento adecuado (psicológico o psiquiátrico según corresponda de acuerdo a su necesidad o eficacia), del que deberá dar cuenta mediante constancia de inicio y evolución semestral, hasta el agotamiento del período de duración de las presentes reglas o ante la existencia de pertinente alta profesional.
Tendrá intervención, además, la Dirección Provincial de los Derechos y Asistencia a la Víctima, para que lleve a cabo un relevamiento de la situación actual de la víctima e implemente un dispositivo de orientación y contención.
Antecedentes
El hecho tuvo lugar la madrugada del 3 de julio de 2019. El hombre provocó mediante golpes de puño en diferentes partes del cuerpo, lesiones de carácter leve a quien en ese momento era su pareja.
En principio la golpiza sucedió en el interior de la vivienda que habitaban y continuó en la vía pública, donde “la arrastró por el piso, tirándole de los cabellos, mientras la golpeaba con un cinturón que poseía una hebilla metálica”, afirmó el magistrado en su sentencia.