Se trata de Héctor Darío Arriola el oficial quien, estando fuera de servicio, protagonizó una pelea junto a un grupo de amigos contra otros cuatro individuos. En principio había sido imputado por tentativa de homicidio pero tras las declaraciones testimoniales se comprobó que no lo quiso matar y terminó procesado por lesiones graves y amenazas agravadas.
USHUAIA.- La jueza de instrucción María Cristina Barrionuevo procesó al efectivo de la Policía que el mes pasado le pegó tres tiros a un joven con el que mantuvo una pelea callejera mientras se encontraba fuera de servicio.
Se trata de Héctor Darío Arriola quien fue procesado debido a que a las 6 de la mañana del 26 de febrero se desplazaba junto a unos amigos por inmediaciones de las calles Bielke y 25 de Mayo, cuando se cruzaron con otros sujetos que comenzaron a agredirlos verbalmente. Entre los mismos se encontraba Mauricio Retamozo quien al parecer intercambió algunos golpes de puño. Pero luego de esto Arriola buscó en su domicilio el arma reglamentaria y tras amenazarlos diciéndoles que los iba a matar, les exhibía la pistola.
Uno de los amigos del policía le dijo que le metiera «unos corchazos» y en ese momento Arriola apuntó a las piernas y le disparó en reiteradas oportunidades a Retamozo.
Producto de dicha circunstancia Retamozo sufrió dos heridas en la cara anterior de pierna y una fractura tibial y base de quinto metatarsiano. Inmediatamente después, Arriola habría accionado la corredera del arma y volvió a cargarla para realizar otro disparo en dirección a Peralta Albín, sin llegar a lesionarlo, según detalló en su momento el Fiscal de la causa.
Si bien la Fiscalía había imputado a Arriola de tentativa de homicidio, luego con las pruebas en el expediente, tanto testimoniales como periciales, se determinó que el hecho se circunscribió al delito de lesiones. Es así que la jueza María Cristina Barrionuevo lo procesó por el delito de lesiones graves, amenazas agravadas y le impuso normas de conducta que ya venía cumpliendo desde que quedó en libertad.
Además de las amenazas agravadas se le impuso un embargo de 100 mil pesos sobre sus bienes. Este monto será retenido por orden judicial hasta cubrir dicho monto.
Cabe señalar que en la faz administrativa la Jefatura de la policía de la Provincia ya separó a Arriola de la fuerza preventivamente y se le inició un sumario que concluirá con su destitución, informaron fuentes policiales.