Sorpresivamente el reconocido operador radial, quien se desempeñaba en la emisora Aire Libre FM, dejó de existir físicamente. La noticia de su fallecimiento caló hondo en la comunidad de Río Grande.
RIO GRANDE.- Profunda tristeza causó este martes la sorpresiva muerte de Fabián “Fulbito” Pérez, un incansable trabajador como operador de radio, productor y persistente colaborador en el deporte motor, donde cumplió el papel de responsable de prensa del Automóvil Club Río Grande.
A sus 48 años, el corazón de “Fulbito” se apagó de manera repentina, lo cual ocurrió a primeras horas de la mañana de este martes 6 de febrero en su domicilio particular, ubicado en calle Bilbao al 1100 y ocurrió a pocos días de haber cumplido un año más de vida.
El deceso fue confirmado por personal del Hospital Regional Río Grande que llegó hasta el domicilio en una ambulancia, ante el requerimiento de la familia.
Fabián Pérez se desempeñaba como operador de radio y productor en la emisora Aire Libre FM, trabajo que comenzó a ejercer desde adolescente y lo mantuvo durante todos estos años. En ese espacio se hizo popular al incursionar de vez en cuando en los micrófonos para brindar alguna información o hacer alguna broma con el equipo periodístico.
El periodista Daniel Puebla, en el muro de su Facebook, escribió una extensa semblanza, de la cual queremos rescatar lo siguiente: “Comenzaste a trabajar con nosotros cuando eras un adolescente, toda una vida compartiendo las cosas buenas y malas de la vida, con una mirada ya sabíamos por dónde pasaba el programa en ese momento. Cómo te vamos a extrañar Fabiancito”.
Este martes los responsables de la radio decidieron no hacer su programación habitual, en señal de duelo por la tristeza que los conmueve.
Mensaje del Intendente
El intendente Martín Perez, miembros del Gabinete, trabajadores y trabajadoras municipales, expresaron su profundo pesar por el fallecimiento de Fabián “Fulbito” Pérez, reconocido operador radial y productor periodístico.
En el mensaje del Municipio se destaca que “Fulbito” fue un gran compañero y colega; un trabajador comprometido con su labor y, principalmente, un vecino que supo ganarse el cariño y el respeto de todo aquel que lo conociera. Así será recordado por quienes tuvieron la dicha de conocerlo.