La Asociación Civil Península Mitre y la Asociación Manekenk, impulsoras del proyecto de Ley que convirtió a Península Mitre en un área natural protegida, aseguran los estancieros del lugar impiden el acceso de turistas y alertaron sobre tareas de mensura realizadas en el área por particulares, evidenciando posibles ocupaciones ilegales.
“Hace pocos días festejábamos la promulgación de la ley provincial 1460 que constituye el Área Natural Protegida Península Mitre. Sin embargo, vemos con preocupación que el acceso público libre por el norte del área no está aún garantizado”, expresaron ambas ONG a través de las redes sociales.
“El acceso norte requiere transitar por el lote rural 120A, propiedad de la estancia María Luisa, desde donde se ejerce un control de acceso a quienes deciden ingresar.
Con mucha gravedad observamos que además, dicho establecimiento hace uso de instalaciones que hoy se encuentran dentro de la Reserva Costera Terrestre del área protegida, instalaciones denominadas Lodge World’s End, desde donde se impide la pesca libre en los ríos Irigoyen y Malengüena”.
Agregan que “dicho lodge no cuenta con autorización por parte del órgano de control @infuetur, mientras que los mencionados ríos SÍ forman parte de los ambientes autorizados para la pesca deportiva en nuestra provincia”.
“Finalmente, aumenta nuestra preocupación por las tareas de mensura realizadas por particulares en la Reserva Costera Terrestre, ya que se han encontrado estacas demarcatorias instaladas recientemente. Esta situación irregular tiene fines desconocidos, pero tememos que estén ligados a pretensiones de tierras sobre la actual área protegida, que no pueden quedar silenciadas y las ponemos en conocimiento de la sociedad y especialmente de los órganos de control @infuetur, @ambientetdf y AREF”.
Por último destacaron que “la ley no es el final del camino de conservación sino el comienzo de un trabajo común” y pidieron a la sociedad que informe cualquier irregularidad en el acceso al ANPPM.