BUENOS AIRES (NA).– River fue superior en el juego frente a Boca, generó varias situaciones de gol que no pudo concretar y se tuvo que conformar, en el estadio Monumental, con un 0-0 en el Superclásico, que poco les sirve a ambos en la lucha por el título del torneo de Primera División.
En un entretenido encuentro, la igualdad, válida por el interzonal de la sexta fecha, le cayó mejor al Xeneize por cómo debió defender y su casi nula participación en ataque, y dejó con el grito atragantado a los hinchas “millonarios”.
Es que River tuvo las opciones más claras, ambas en los pies de Rodrigo Mora, que en el primer tiempo desvió el balón al palo derecho y en el complemento fue el arquero Agustín Orion el que se jugó la vida para achicar tras un centro al segundo palo.
Con el empate, el elenco de Núñez alcanzó la línea de Independiente con ocho puntos, en el octavo lugar de la Zona 1, mientras que el Xeneize, con la mismas unidades, está sexto en la Zona 2, a ocho del líder Lanús.
El partido empezó con muchísimo ritmo de ambos lados, pero fue River el que logró mantener esa intensidad con el dominio de la pelota y de a poco fue ganando el mediocampo.
Desde ahí, con el tándem Ponzio-Domingo, más los avances siempre limpios por los laterales de Mercado y Vangioni, los dirigidos por Marcelo Gallardo empezaron a arrinconar a Boca.
La constante movilidad de Ignacio Fernández y Sebastián Driussi, con Alario y Mora entrando y saliendo de la zona de fuego, descolocó a la defensa de Boca.
Igualmente, lo más peligroso de River hasta los 30 minutos del primer tiempo llegó con pelota parada, después de un centro de Nacho Fernández desde la izquierda que Mercado, sin marca y con tiempo de ejecución, desvió afuera.
Si bien en la previa, parecía que la intención de Barros Schelotto con Lodeiro de entrada era más de vocación ofensiva, dependió casi exclusivamente de la velocidad de Palacios para desbordar y generar algo de peligro.
Así, sobre el último cuarto de hora del primer tiempo, iba a llegar la oportunidad más clara del partido para el Millonario, en un desvío de Rodrigo Mora al palo -anticipó a Cata Díaz-, tras un desborde por izquierda de Sebastián Driussi.
El 0-0 pareció quedarle corto al desgaste que hizo River en los primeros 45 minutos, principalmente porque redujo a Boca a la mínima expresión futbolística.
Merma física
Sin cambios de entrada en el segundo tiempo, River intentó mantener su dominio de entrada, aunque lo más significativo llegó a partir de un grosero error defensivo de Boca, que dejó a Driussi cara a cara con Orion, aunque le erró al arco.
La merma física, pese a que River venía con una semana de descanso y Boca había jugado el jueves, empezó a hacerse sentir en el local y se notó en el despliegue ofensivo.
Por eso, Gallardo apostó por el ingreso de Pity Martínez, bien abierto por izquierda, y Alonso, para acompañar a Alario como referente de área, soltando a Mora.
En ese interín también Boca quiso adelantarse un poco y en una de las pocas jugadas que pudo hilvanar un par de pases seguidos en ofensiva, Lodeiro habilitó a Palacios, que no pudo dominar cuando quedaba cara a cara con Barovero, y después terminó cometiéndole infracción al arquero de River.
Es cierto que Martínez fue punzante sobre la posición de Jara, pero como toda la tarde a River le faltó la puntada final.
Ni siquiera Mora, después de un buscapié de Pity Martínez que se le escapó entre las piernas a Alario dentro del área chica, pudo con Agustín Orion, que achicó bárbaro jugándose la vida sobre el palo izquierdo.