BUENOS AIRES (NA).- El plantel de River Plate viajó anoche rumbo a Belo Horizonte, para enfrentar mañana a Cruzeiro por los cuartos de final de la Copa Libertadores, despedido por una multitud en el estadio Monumental y con el delantero Rodrigo Mora entre algodones.
Los dirigidos por Marcelo Gallardo fueron despedidos por una multitud que colmó la tribuna Centenario alta para conmemorar el aniversario 114 de la institución de Núñez, ya que fue fundada el 25 de mayo de 1901.
El plantel Millonario se entrenó por la mañana en el estadio, luego de la suspensión del partido ante Tigre -el domingo por la noche- por la decimotercera fecha del torneo “Julio Humberto Grondona”, debido al fallecimiento del jugador Cristian Gómez, de Atlético Paraná, quien sufrió una muerte súbita.
Los hinchas del equipo riverplatense estuvieron reunidos en el estadio de Núñez para hacer un “banderazo” en apoyo al equipo, que debe remontar el 0-1 que recibió el pasado jueves en el partido de ida de los cuartos de final del certamen continental.
Ahora debe al menos ganar 1 a 0 para forzar los penales en su visita al mítico Mineirao de Belo Horizonte, donde lo espera un Cruzeiro con el ánimo en alza.
No obstante, la gran preocupación del conductor “millonario” es la rodilla del delantero uruguayo Rodrigo Mora, quien padece una molestia desde hace varias semanas y que lo hace estar en duda para la revancha.
Si bien en principio el Muñeco Gallardo cuidará al delantero hasta el final, sobre el partido mismo decidirá si Mora podrá compartir el ataque con el colombiano Gutiérrez.