El rompehielos ARA Almirante Irizar zarpó el domingo del puerto de Ushuaia rumbo a la Antártida para realizar las pruebas de hielo que le permitirán volver a participar de las campañas que organiza el Ministerio de Defensa.
USHUAIA.- Tras permanecer en el puerto local desde el sábado 6 de octubre, el rompehielos ARA Almirante Irizar zarpó este domingo rumbo a la Antártida para realizar las pruebas de hielo que le permitirán volver a participar de las campañas que año a año organiza el Ministerio de Defensa, para logística y estudios científicos.
Durante su permanencia en el puerto de Ushuaia y para sumarse a los festejos por un nuevo aniversario de la ciudad, el jueves 12 de octubre el Irizar tubo una jornada de puerta abiertas donde el público, dividido en varios grupos, recorrió el puente de comando, la cubierta de vuelo, los alerones del buque y el hangar, donde se exhibió un helicóptero Sea King.
Los asistentes recibieron también una breve charla sobre la historia de la unidad y contaron con el asesoramiento de integrantes de la dotación, que respondieron todas sus dudas e inquietudes.
El rompehielos estuvo en el puerto de Ushuaia para reaprovisionarse en vista a las pruebas de hielo que se efectuarán en la Antártida, entre ellas una navegación por bordes y packs de hielo para probar su comportamiento y comprobar sus capacidades, de cara a la futura Campaña Antártica de Verano.
Más funcionalidad
En todo el sentido de la palabra, el rompehielos Irizar amplió su funcionalidad e instalaciones, para potenciar sus posibilidades. A los 111 marinos que conforman la dotación normal que lo tripula, se le suma el personal de la Aviación Naval que opera los helicópteros Sea King, más la dotación de servicios complementaria.
Cumplida la demanda de la Dirección Nacional del Antártico (DNA) con la multiplicación de laboratorios, más de 60 científicos podrán desarrollar paralelamente tareas de investigación asociadas al mar y la meteorología, en los ahora 13 recintos de última generación; permitiendo a la vez el alojamiento y servicios para un total de 200 personas dedicadas a la investigación científica.
Por otra parte, la incorporación de nuevos equipos permitirá realizar nuevas tareas, como la toma de muestras de fondo y fauna marina, para determinar características de índole migratoria y de estudio general de las especies; además del relevamiento de información física de sedimentos y la incorporación de una campana en el laboratorio de química, que permite obtener un ambiente aislado para activar reacciones químicas.