BUENOS AIRES.- Debido a la pandemia por coronavirus, la higiene ocupó un rol fundamental en la vida cotidiana. Más que nunca, el enfoque está puesto en las medidas de desinfección propias y del hogar, necesarias para que el virus no se propague.
Una pregunta frecuente es cada cuánto hay que lavar las sábanas y la ropa de cama. La realidad es que existen muchos tipos de personas: las que la lavan cada semana, las que lo hacen cada 15 días y otras a las que les cuesta decir a viva voz que las cambian cada mes.
La dermatóloga Hadley King, oriunda de Nueva York, escribió sobre el tema en un artículo del Huffington Post y explicó la importancia de mantener la cama limpia.
“Cuando te metes en la cama, la contaminas con partículas de células muertas de la piel (alrededor de 50 millones al día), sudor, maquillaje, cremas, pelo o cualquier otra cosa que hayas estado llevando contigo durante el día, desde polen hasta partículas de suciedad, y sobre todo, virus y bacterias”, aseguró.
Los expertos aseguran que no debe pasar la semana y media sin lavar la ropa de cama.
“Cuánto más cerca esté la tela de la piel, más frecuentemente se debe lavar”, aseguró Joshua Zeichner, otro dermatólogo especializado. “Generalmente recomiendo que las sábanas y las fundas de la almohada pasen por la lavadora una vez por semana. En caso de que sudes más, debes hacerlo con más frecuencia”, indicó.
Es importante aclarar que no solamente se habla de las sábanas y el pijama, sino también de acolchados y frazadas.
“Si tienes la piel grasa o usas cremas, así como medicamentos para el acné, puedes alargar el tiempo a más de una semana, dado que las fundas del edredón generalmente no tienen mucho contacto con la piel, puedes lavarlas con menos frecuencia, hasta dos semanas”, prosiguió Zeichner.
También hay que lavar la almohada, ya que alberga una numerosa cantidad de bacterias y ácaros.
Por eso, además de lavar la funda tan a menudo como las sábanas, cada cierto tiempo hay que meter en el lavarropas a la almohada. Su limpieza variará en función de su composición, por eso mira la etiqueta y sigue las instrucciones.
Lavar las sábanas y matar los gérmenes:
-Leer todas las etiquetas para seguir los requisitos de cada tela.
-Lavar con la temperatura de agua más caliente que aparezca en la etiqueta. “Las mezclas de poliéster se lavan mejor usando agua templada, mientras que el algodón puede tolerar agua caliente. El agua más caliente mata más gérmenes y también se hace cargo de los ácaros del polvo que prosperan en la ropa de cama”, indica la marca Tide.
-Separarlas por el color. Al igual que la ropa, los colores oscuros o rojos pueden desteñirse o correrse a los colores más claros.
-De ser posible, colgarlas en un tendedero al sol, ya que la luz solar es un desinfectante natural.
-Planchar siempre la ropa de cama, ya que planchar ayuda a matar el resto de gérmenes y ácaros del polvo.
-Mantener las sábanas y la ropa de cama en lugares frescos y secos.
Conservar hasta tres sets de sábanas por cada cama. Rotar las sábanas semanalmente para mantener esa sensación limpia y fresca.