BUENOS AIRES (Pasión Futsal y nuestra redacción).- En un partidazo con polémicas y mucha intensidad, el «Ciclón» se adelantó en la serie ante el bicampeón Kimberley al ganarle por 4-3, gracias a un penal del fueguino Pablo Vidal a menos de tres minutos del final.
Como le pasó en el primer partido de la serie ante Ferro, San Lorenzo debió sufrir bastante para adelantarse ante el bicampeón Kimberley en el arranque de la Semifinal de los Playoffs por el título 2017, ante una multitud en el Centro Deportivo de Racing de Avellaneda.
Un penal del fueguino Pablo Vidal (autor de tres goles), en los minutos finales del partido y con polémica por la sanción del árbitro Patricio Baliner (todos en el «Celeste» reclamaron que la falta del arquero Lucas Farach a Stazzone fue fuera del área), significó esa ventaja para el «Ciclón».
La mala para los dirigidos por Facundo Ruscica fue la expulsión por doble amarilla de Eduardo Villalva, que se perderá la revancha del miércoles y estaría disponible para un eventual tercer partido.
Kimberley, diezmado por las lesiones de Pablo Marcone (rodilla) y Lucas Martínez Riveras (sufrió una fuerte contractura muscular de arranque), plantó cara gracias a un soberbio trabajo del capitán Santiago Basile, que se puso el equipo al hombro.
San Lorenzo se apoyó en las atajadas de Brian Steccato, la solidez de Stazzone y la zurda de Gerardo Menseguez para el ataque.
Después de un primer tiempo parejo, dos goles en un minuto adelantaron al «Ciclón» en la serie, anotados por Thomas Baisel y el propio Vidal.
Tras el descuento de Noé Pérez Leiva -que erró un doble penal-, fue el fueguino Vidal el que acertó desde los diez metros para dejar el marcador 3-1.
Y en el peor momento del «Celeste», otra vez Basile trepó por derecha, dejó tirado a Steccato y definió desde un ángulo cerrado para recortar distancia.
En el complemento, San Lorenzo dejó de ser intenso en la marca, le dio más espacio a Basile, Pérez Leiva y Franco Martínez Riveras -de muy buena actuación, quien motivó la segunda amarilla de Edu Villalva tras ganarle por velocidad en la banda.
Sobre el filo del ingreso del quinto hombre de San Lorenzo, Basile metió un milimétrico pase en diagonal, donde estaba plantado Pérez Leiva, que de primera neutralizó el achique de Steccato y puso tablas (3-3).
Por momentos, el desarrollo se «rompía» en transiciones, pero ninguno de los dos estuvo fino en el último pase.
En una de esas «contras», Stazzone se metió a toda velocidad y, cara a cara con Lucas Farach, lo intentó gambetear y el arquero lo bajó, muy finito en el borde del área, aunque el árbitro Patricio Baliner sancionó el penal.
A Vidal poco le importó, porque con mucha tranquilidad sentenció la historia y le dio la ventaja inicial a San Lorenzo, que sueña con cerrar la serie en dos juegos, para pensar en la búsqueda de un título.
Boca, también sufriendo
El «Xeneize» se apoyó en una soberbia actuación de su arquero Guido Mosenson y, con un golazo de «Kiki» Vaporaki, superó al corajudo Barracas Central por 3-2, en el Juego 1 de la Semifinal de los Playoffs.
No jugó del todo bien, sufrió por varios pasajes del partido, pero Boca sacó adelante el primer punto de la serie semifinal de los Playoffs frente a Barracas Central por 3-2, en el microestadio de Racing.
Tras ser el único que pasó los Cuartos de Final en dos partidos, el «Xeneize» se apoyó en las atajadas de Guido Mosenson y el desequilibrio individual de sus jugadores, principalmente Constantino Vaporaki, autor de un golazo.
En la primera mitad, los dirigidos por Hernán Garcías controlaron el juego, con una asfixiante presión alta que no dejó crecer a Claudino y Ramírez, ni tampoco conectar con el pivot Seba Souto, las tres piezas claves del «Guapo».
Con la pelota, Boca tuvo mucha prolijidad y supo explotar la velocidad de sus individualidades por la banda, que hicieron que exigiera al máximo a Matías Quevedo, que respondió en la mayor parte del partido.
Fue Kevin Arrieta el que abrió el camino rápidamente con un puntazo alto, mientras que «Kiki» Vaporaki amplió la ventaja con una obra de arte, después de enganchar dos veces ante Quevedo.
Pero enojado con algunos fallos arbitrales, Boca se fue de partido y permitió a Barracas Central retornar al juego, siempre desde los pies de Claudino y Ramírez.
A Boca le costó mucho generar chances de peligro en la segunda etapa y se vio superado en intensidad por un Barracas Central que ya sabía lo que era dar vuelta resultado (lo hizo dos veces contra Hebraica en Cuartos de Final).
Sin embargo, Custodio pudo girar sobre la derecha y asistir al segundo palo a «Pipi» Giménez, que le daba tranquilidad al «Xeneize».
Aunque todavía Barracas Central tenía una vida más, motivada por la polémica expulsión de Andrés Santos por doble amarilla, que permitió al rosarino Tomás Tavella poner el 2-3.
El «Guapo» fue en busca del empate, pero se topó con Mosenson y la defensa de Boca, que se quedó con la primera ventaja en la serie.
