El expresidente Julio María Sanguinetti, líder del Partido Colorado y aliado del gobierno de Luis Lacalle Pou, afirmó hoy que los implicados en la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset “pudieron haber tenido una prudencia mayor”, pero “no la tuvieron” y, a su entender, el oficialismo “cometió el error de no reconocer que se cometió un error”.
TELAM.- “Hubo un mar de sargazos en el que se fueron metiendo sobre un clima de error, porque todo eso era innecesario”, dijo Sanguinetti sobre la crisis del gobierno, en relación a la entrega del pasaporte a Marset, en declaraciones a Radio Sarandì, que reprodujo el periódico montevideano La Diaria.
Completó: “Si de entrada dicen lo que fue, no estamos hablando de pruebas, es un chat: que es mío, lo hago y lo deshago. No estoy eliminando un documento de otro, un documento oficial ni una prueba”.
A su entender, “se cometió el error de no reconocer que se cometió un error, porque sí pudo haber sido distinto el tema, debió haber sido distinto, y esa es la responsabilidad política”.
El dirigente colorado señaló que los integrantes del Gobierno “pudieron haber tenido una prudencia mayor, no la tuvieron; pudieron haberse manejado con más claridad desde el principio y no lo hicieron”.
En cambio, dijo, “tuvieron discrepancias entre ellos, tuvieron visiones contradictorias”.
Sanguinetti consideró, al igual que Lacalle Pou, que la entrega del pasaporte al narcotraficante uruguayo fue “sobre la base de un acto legal pero en una situación que pudo haber tenido una tramitación distinta”.
Negó la incidencia del mandatario en la discusión por revelar los chats entre los entonces subsecretarios del Interior y Cancillería, Guillermo Maciel y Carolina Ache. “El rol del presidente de la República está muy
claro”, dijo.
Señaló que luego de la interpelación, que no tuvo consecuencias políticas en los ministros del Interior y Relaciones Exteriores, “no hay ninguna razón para dudar de esa palabra, para pensar diferente de lo que efectivamente fue”.
Para Sanguinetti “los errores son los que generan esta situación política, que ameritan la renuncia nada menos que de dos ministros fundamentales”.
Si bien dijo que es “un tema penoso”, opinó que “en lo político, no hay más nada para hacer que lo que reclamaba la oposición, que se alejaran los involucrados”.
El secretario general del PC dijo que las “mayores responsabilidades o no” en el tema, las dilucidará la Justicia. Consultado sobre el rol de Ache, que presentó a la Justicia las conversaciones con el excanciller Francisco Bustillo y el asesor del presidente Roberto Lafluf, Sanguinetti señaló:
“Actuó con honestidad, como creo que actuaron todos”.