BUENOS AIRES (NA).- El vicegobernador de Santa Cruz, Pablo González, y el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, se expresaron ayer ante el Senado en contra del proyecto que habilita el pago a los fondos buitre, aunque con argumentos diferentes.
«Nuestras senadoras (Virginia García y María Ester Labado) seguramente van a votar negativamente este acuerdo», remató el vicegobernador, que concurrió al Senado en representación de la gobernadora santacruceña, Alicia Kirchner.
Además, en el inicio de su exposición habló de la «guadaña de la alegría», en alusión a los despidos en el Senado, y realizó una fuerte crítica al reparto de fondos por parte del Gobierno nacional que se evidencia, según expresó, en la «paralización de obra pública» en su provincia.
En cuanto a la toma de crédito externo, señaló: «Nosotros tenemos endeudamiento para crecer, en las represas (Néstor Kirchner y Jorge Cepernic) con financiamiento chino a tasas accesibles y esa obra también está parada. No quiero pensar que (la paralización de obras con fondos nacionales) sea parte de una estrategia para presionar a los gobernadores a votar este acuerdo como está».
Sobre el final de la jornada, llegó el turno de Rodríguez Saá, quien realizó una extensa exposición sobre la historia de la deuda externa y como conclusión pidió a los legisladores «enfriar un poco el partido» ante el pedido del Gobierno de aprobar la iniciativa.
Tras advertir que «endeudarse es un terrible error», el puntano agregó: «¿Por qué no nos serenamos? ¿Por qué no leemos el caso Olmos? ¿Por qué cedemos la soberanía argentina, cómo nos va a decir el juez (Thomas) Griesa qué ley tenemos que dictar?».