BOGOTÁ (AFP).– Independiente Santa Fe de Colombia y Huracán buscarán hoy desde las 21:00 (hora argentina) su primer título internacional cuando se midan en el estadio El Campín, en Bogotá, en el partido de vuelta de la final de la Copa Sudamericana 2015.
El cuadro rojo de Bogotá ha hecho una gran campaña en lo que va del año y hasta hace tres semanas era candidato a quedarse con la triple corona de la liga y la copa locales y la Sudamericana.
Pero hoy, cuando reciba a Huracán tras el 0-0 logrado hace una semana en Buenos Aires en el partido de ida de la final, tendrá la última oportunidad de salvar su año y hacer historia, pues perdió la final de la copa colombiana y en en cuartos de final de la liga frente al Junior de Barranquilla.
Sin embargo, pese a la gran motivación, el conjunto colombiano deberá superar algunos problemas internos por denuncias de exdirectivos de la institución que acusan de corrupción a jugadores del equipo por unos supuestos cobros para poder actuar.
En respuesta a esto, los jugadores desestimaron las acusaciones en una carta donde también reafirman su apoyo a César Pastrana, presidente de la institución.
El otro gran escollo que deberá superar Santa Fe es el propio Huracán, que se muestra como un equipo sólido en defensa y peligroso en el ataque, especialmente con su potente centrodelantero, Ramón Ábila.
Quedar en la historia
Por su parte, Huracán llegó a Cali, donde permanecerá hasta pocas horas antes del juego, como estrategia para contrarrestar los 2.650 metros de altura de la capital colombiana, y también asume el encuentro como un compromiso histórico.
El cuadro del técnico Eduardo Domínguez se preparó con todo para el juego y anunció que suministrará a sus deportistas viagra, ibuprofeno y ácido tióctico que ayuda a mejorar la circulación pulmonar, en una práctica habitual en algunos equipos argentinos cuando juegan en altura.