El rapero, que se encuentra detenido a la espera de un juicio, volvió a recibir una denuncia en su contra que lo señala como abusador de un nene de 10 años. Los detalles.
De acuerdo a la cascada de acusaciones en su contra, Sean Diddy Combs, también recibió una denuncia por agredir sexualmente a un nene de 10 años. El rapero estadounidense, quien puso a Hollywood en crisis por la cantidad de estrellas que se encuentran implicadas en su causa, se encuentra detenido y a la espera de un juicio en su contra con un total de, aproximadamente, 200 denuncias por distintos tipos de agresión. Pero ahora, una nueva acusación sorprendió a todos.
La demanda que tiene como protagonista al menor de edad, fue presentada ante la Corte Suprema del Estado de Nueva York y es la última del abogado Tony Buzbee, quien anunció a principios de octubre planes para presentar 120 nuevas demandas contra el magnate en los próximos meses.
Fue el sitio Variety el cual informó que la denuncia fue realizada por un tal John Doe, quien actualmente reside en California y demandó al rapero por una agresión que tuvo lugar en el 2005, año en el cual él todavía era un niño de 10 años interesado en convertirse en actor y/o rapero.
Tal es así que, como señala el mismo portal, todo comenzó cuando el niño manifestó su deseo de ser artista. Es por esto que su padre buscó miembros de la industria que lo ayuden y un consultor le recomendó viajar desde Los Ángeles, su entonces lugar de residencia, a Nueva York, para encontrarse con Combs. Pero, el rapero solicitó a su contacto en común que, antes de conocer a su familia, quería conocer al menor a solas para “una audición”.
El relato del joven después continúa dando detalles de cómo fue su encuentro con Sean Combs. “Variety” señala que el consultor llevó al pequeño a la habitación de hotel del rapero y los dejó solos. Allí John Doe interpretó algunas canciones de rap para Diddy, quien le habría dicho que lo podía hacer una estrella, pero que después le preguntó cuánto deseaba serlo. Según la denuncia, “el demandante respondió, como lo haría cualquier niño de diez años, que ‘haría cualquier cosa’”.
Tras esto, la denuncia continúa relatando que Combs y una persona más presente en la habitación, de la cual no se revela nombre, le dieron al niño una soda que él bebió sin problemas. Poco después, comenzó a sentirse “un poco raro”, lo que, según el abogado del demandante, se debía a que la bebida estaba mezclada con drogas “que incluían, entre otras, GHB y/o éxtasis”. Después de consumir el refresco, Combs supuestamente le dijo al niño que se acercara a él y lo empujó hacia abajo, diciéndole algo como “a veces tienes que hacer algunas cosas que no quieres hacer”.
Una vez allí, Sean expuso su miembro y le dijo al menor que lo besara. Después de que el joven lo rechazara, Combs aparentemente lo forzó a realizarle sexo oral, hecho que hizo que el niño luego perdiera la consciencia. Cuando volvió en sí, “los pantalones de Combs estaban desabrochados y le dolían mucho el ano y las nalgas”. Lloró y dijo que quería ver a sus padres, a lo que Combs le dijo que si le decía algo a alguien, lastimaría a sus padres.
La denuncia también relata el momento en el que la consultora volvió a la habitación a buscar al menor. Ella notó que el pequeño estaba “muy conmocionado” y lo llevó de regreso con sus padres, quienes comprobaron que estaba “letárgico y actuaba de manera diferente”. En el tiempo transcurrido desde la presunta agresión, John Doe ha sufrido “depresión y ansiedad graves, que lo dejan desesperado y fatigado”.
En lo que respecta a la defensa de Combs, sus abogados negaron todas las acusaciones y manifestaron que el abogado querellante busca solamente tener un momento de fama. Aún así destacaron que, a partir de ahora, Diddy no va a negar más acusaciones “porque no tiene tiempo de seguir negando cosas ridículas”.