Se inauguró ayer la Feria El Desafío de Producir. Es la 39º edición, la última del año y de la gestión Melella. Con 155 stands, productores, artesanos, manualistas, y gastronómicos, recibirán a los vecinos en la Misión Salesiana, de 11 a 20 horas.
RIO GRANDE.- Se realizó ayer el acto de inauguración de la 39° edición de El Desafío de Producir. El intendente de la ciudad, Gustavo Melella brindó palabras de agradecimiento y despedida de la feria emprendedora que viene realizándose hace casi una década.
Además del gabinete municipal, participaron las concejalas Verónica González y Miriam Mora; los legisladores provinciales Mónica Urquiza y Pablo Villegas, funcionarios, vecinos y emprendedores
“Si bien es la última feria que compartimos como gestión municipal, lo bueno es que cuando se piensa en las políticas públicas y en el bien de una ciudad, las cosas buenas continúan”, dijo Melella.
“En el camino que hemos hecho para tantos emprendedores están también los recursos de nuestros vecinos que pagan sus impuestos. También están los créditos municipales con una tasa fija de devolución del 12 % anual, que es una tasa de interés que no existe en el país. Eso el Municipio lo vino sosteniendo como política pública -justificó- porque el Estado tiene que empujar para que el sector privado se desarrolle, crezca y genere empleo y así lo hicimos”.
Melella recordó también que a partir de las primeras capacitaciones y subsidios, se hizo evidente la falta de un lugar para vender los productos: “Y a la Negra (Cristina) Morán y Flores que hoy está más presente que nunca, se le ocurrió hacer esta feria y le pusimos el Desafío de Producir porque era todo un desafío”, comentó.
“Ser emprendedor es tener dignidad, ser emprendedor es tener esperanza, es ponerle a la situación fuerza cuando estás caído, y para nosotros son un llamado de atención y un signo de esperanza permanente. Vamos a llevar a la Provincia ese espíritu emprendedor y seguramente Martín (Pérez) y su equipo seguirán adelante con esta feria con aires nuevos y eso está bueno que pase y ojalá que en algunos años se conozca a Tierra del Fuego como la provincia de emprendedores porque somos gente que hemos venido o hemos nacido para ser trabajadores con dignidad”, concluyó el gobernador electo.
Cómo cada edición de El Desafío de Producir, El Sureño recorrió los stands, y conversó con los productores.
Sabrina, está apenas por segunda vez con su emprendimiento Malaika Artesanías. Ella confecciona elementos en madera balsa a partir de moldes, que se cortan con una máquina caladora: “Puedo hacer de todo, letras, figuras, dibujos. Trabajo a pedido también. Es un oficio que estoy aprendiendo de mi mamá. La verdad que ella me ayuda un montón”, dijo.
También tuvo su espacio el programa Carne Porcina Local, que tiene empadronados cerca de 26 productores, que utilizan la planta de faena municipal, y luego comercializan la carne en locales de diferentes de partes de la ciudad.
“Es más que nada para promocionar el programa y la carne de cerdo de los productores locales. Por muchos motivos es más barato, es más sano. El cerdo es una carne que no tiene grasa en el músculo. Sólo tiene grasa mezclada con músculo en la bondiola, después es carne magra. Es ideal para personas que tienen colesterol, por ejemplo”, contó Luis Barría, coordinador de la planta de faena.
Wolf McFire, es un emprendimiento que surgió de una necesidad personal: “Yo toco la guitarra y siempre buscaba una determinada forma de soportes que no había acá. Así que me puse a hacerlos yo. Con la madera de los palets. Y los vendo”, dijo el artesano.
En Fa-Mi; adoran los chops. Para esta época especialmente, tienen ofertas de vasos y chops, que además están hechos con botellas recicladas.
Regina Isabel López, tiene por primera vez, su stand en la Misión Salesiana. Además de pintar, realiza diferentes elementos en la técnica decoupage. Especialmente, como otros artesanos, ya ofrece platos y otros utensilios con temática navideña a muy buenos precios.
Apenas al salir del área principal de la feria, en el pasillo, se puede ver a los emprendedores de Huertas Urbanas, que ofrecen plantas aromáticas y florales. De amplias variedades.
Y en el final, en el último stand, el 155 está SuperVeve, Cristina y su esposo, cultivan plantas aromáticas, árboles, flores, suculentas, y lo que puedan hacer crecer en su tierra: “Esta es mi oficina, dice el productor, mostrando las coloridas macetas. Lo que encontramos, lo hacemos crecer. Las plantas sólo necesitan amor. Acá los esperamos, a todos”.