BUENOS AIRES (NA).- Sin haber podido aprovechar el buen momento que tuvo al principio del complemento, Argentina perdió ayer sobre la hora 1 a 0 ante Brasil en el estadio King Abdullah Sports City de Arabia Saudita, en un amistoso internacional.
El único gol lo convirtió Miranda de cabeza a los 47 minutos del segundo tiempo, luego de un córner enviado por Neymar que encontró al defensor muy solo para definir.
Argentina controló el trámite en la primera etapa sin ser profundo, tuvo chances para convertir en el primer cuarto de hora de la segunda y, luego de no haberlas aprovechado, terminó siendo superado ante un adversario que está más armado.
En el partido cien disputado entre ambos, Brasil inclinó la balanza en el historial al quedar con 38 victorias, 37 derrotas y 25 empates.
Argentina fue prolija y no pasó sobresaltos
En la primera etapa, Argentina apostó a estar ordenada, sin pasar sobresaltos, y a excepción de una jugada aislada que casi termina en gol de Miranda, lo logró con creces.
Consciente que enfrentaba a un rival poblado de estrellas, que sólo tuvo la baja de Marcelo por lesión, el equipo de Lionel Scaloni ajustó mucho las marcas y no permitió que Brasil tuviera sociedades, por lo que dependió mucho de Neymar, muy bien controlado por Renzo Saravia, uno de los puntos altos.
En la mitad de cancha, Battaglia y Paredes hicieron un partido más lento, de tenencia y eso generó que el equipo no quedara mal parado, aunque tuvo un costo en ofensiva ya que Mauro Icardi por momentos estuvo bastante solo y mucho de espaldas al arco.
Con este escenario, Argentina tuvo dos ocasiones para marcar: un tiro cruzado de Lo Celso luego de un buen centro de Tagliafico se fue apenas desviado y un tiro libre de Paulo Dybala que “besó” un palo.
En cambio, Brasil contó con la más clara luego de un centro de Casemiro que definió Miranda y que Nicolás Otamendi sacó, de cabeza, en la línea.
Arrancó mejor Argentina, pero terminó pagando
En los primeros quince minutos del complemento, el partido se rompió un poco a partir de que Argentina tuvo dominio del balón y un cambio de ritmo que le hizo ser más punzante en ofensiva, aunque las chances de Icardi y un tiro desde lejos de Paredes no terminaron en gol.
Como durante casi todo el juego, Brasil dependió mucho de Neymar y recién a los 23 pudo ganarle a Saravia y generar una ocasión neta: luego de un desborde suyo, metió un centro que Richarlison, con todo el arco de disposición, terminó enviando afuera.
En los últimos minutos de juego, y con bastantes cambios de cada lado, el equipo dirigido por Tité manejó el balón y se posó en campo adversario.
Incluso, Neymar abandonó su posición de extremo por izquierda y, parado por el centro, no tuvo una marca fija y eso le permitió generar un mayor volumen de juego.
El final encontró a Brasil dejando una mejor imagen y, aún sin tener un gran juego asociado, terminó volcando el juego sobre el área argentina.
Así las cosas, tuvo tres chances más que no terminaron bien porque Romero tuvo una buena tapada ante un tiro de Arthur, un remate de Casemiro se fue apenas desviado y porque el ingresado Richarlison no definió bien.
Cuando parecía que el ganador se definiría en los penales, un córner de Neymar terminó en gol: Otamendi perdió la marca de Miranda, Romero tardó en salir y el defensor terminó anticipándolo de cabeza.