PARÍS (AFP).– La Eurocopa 2016 vivió ayer su primera jornada de descanso tras el cierre de la fase de grupos con una tensa calma, a la espera de la apertura de los picantes octavos de final, con un par de cruces de alto voltaje como el Croacia-Portugal de Lens y el España-Italia de París, que reedita la final de 2012.
Otros choques también generan cierto morbo, como el Francia-Irlanda del domingo en Lyon, donde flotará en el ambiente aquella famosa “mano de Thierry Henry” que dejó fuera a los irlandeses del Mundial de Sudáfrica 2010.
Alemania, otro de los candidatos al título, espera la recuperación de su central Jerome Boateng para el choque con Eslovaquia.
El DT alemán, Joachim Low, se debate entre los Marios del ataque, Gotze y Gómez, o la alternativa de ponerlos a ambos para destrabar un ataque atascado, con apenas 3 goles en su haber.
Por otra parte, el Gales de Gareth Bale choca con Irlanda del Norte, el equipo con las peores estadísticas del campeonato que de todos modos se las arregló para llegar por primera vez a octavos.
Bale quiere ser rey
“No se viene aquí para jugar tres partidos y volverte a casa. Nuestro objetivo final es intentar ganar el torneo”, lanzó envalentonado Bale, quien lidera la tabla de goleadores con tres tantos.
Por su lado, los jugadores ingleses, que se miden el lunes con Islandia, aprovecharon el día libre para votar en el importante referéndum sobre la continuidad de Gran Bretaña en la Unión Europea.
Portugal, tras una tarde soñada por Cristiano Ronaldo con doblete y dos récords -primero en marcar en cuatro Eurocopas distintas; mayor cantidad de partidos en Eurocopas (17)-, enseguida volvió a las prácticas en Marcoussis para enchufarse en el duro cruce con Croacia. CR7 fue el hombre buscado en un entrenamiento abierto, aunque la novedad ha sido que Raphael Guerreiro se movió con normalidad junto a sus compañeros.
La Cuadriculada, que también prende velas para que Luka Modric llegue entero (molestias musculares), parte como favorita en el duelo de mañana en Lens.
Sin duda, el clásico europeo de estilos más esperado se verá en el Stade de France el lunes, cuando el fútbol vistoso de España intente imponerse a Italia, que cuenta con la mejor defensa del torneo.
