Desde temprana edad ha tenido serias dudas respecto a su apariencia y, sobre todo, su identidad.
En la primera temporada recibía bullying e insultos homófobos por parte de los jugadores de fútbol, ya que lo percibían al principio como una “chica masculina”. Su confianza crece al leer y conocer los diarios e ideas de su antepasada Dorothea Putnam, la cual vestía de manera varonil por ser pionera y también al ser llamada “niño” por Ruth Walker, la abuela vidente de Roz, estando seguro por fin de que es un chico.
En la segunda temporada, cambia su apariencia y nombre, llamándose ahora Theo Putnam.