Antonella Obando es la creadora de la cuenta de Instagram Chequea como se Memea. Ahí difunde memes, propios y ajenos, realiza entrevistas y vivos sobre temas de actualidad e interés general. En esta nota le contó a diario el Sureño cómo empezó y por qué cree que los memes son más que solo chistes.
RIO GRANDE.- Desde el inicio del aislamiento las comunicaciones remotas proliferaron y las tareas cotidianas se adecuaron a la cuarentena, así dieron lugar a situaciones que fueron satirizadas luego en redes sociales. Los memes, gifs y sitckers son desde el inicio, protagonistas. Antonella Obando es una joven comunicadora de la ciudad de Río Grande que, además desde la cuenta Chequea Como se Memea, expresa a través de memes su ideología usando humor e ironía.
Desde octubre del año pasado Chequea como se Memea está en Instagram (Ig) y desde entonces sigue sumando seguidores: “Empecé como aficionada de los memes. Imaginate que compartía entre 30 y 50 memes en las historias de Instagram y eso generaba que muchos memes que estaban copados desaparecieran en 24 horas. Entonces tomé consciencia del archivo que tenía en ese momento de muchos memes bastante divertidos y decidí armar una cuenta aparte, solo para memes. Aparte, me pasaba acá en Río Grande que me cruzaba por la calle algunas personas que me decían ‘qué buenos tus memes’ y no daba que se tuvieran que fumar las publicaciones e historias de mi cuenta personal”, explicó Antonella.
Humor propio y del otro
Al principio sólo publicaba memes que a ella le parecían chistosos, luego comenzó a ampliar el horizonte acorde a diferentes preferencias y sentidos del humor: “Se ve, o comencé a darme cuenta que tengo un sentido del humor que algunos consideran ‘particular’ y no era admitido por Instagram o sus normas comunitarias”, comentó la joven. Chequea es la tercera cuenta que armó. Y en los meses de permanencia que acumula ya tiene más de 23 mil seguidores: “La primera cuenta que me cerraron tenía unos 2500 seguidores, la segunda unos 4500. Después de los vaneos y los cierres, en esta cuenta, pensé de una forma más estratégica. Me enfoqué en lo que realmente quería hacer, y usando otras herramientas. Además, la cuarentena me ayudó como material a desarrollar la creatividad”, explicó.
La cuarentena además abrió la ventana que le permitió desarrollar mensajes a otro nivel. Comenzó a hacer vivos y entrevistas en las que desarrolla temas que le generan interés. Siempre pensando desde su profesión como comunicadora, los memes se convirtieron además en una herramienta: “Muchas veces se ha banalizado el tema de los memes. Pero detrás de algunas de las cuentas yo conozco a los que las crearon y tenés desde psicólogos, colegas comunicadores, traductores, las chicas de Memes para todxs son docentes. Memesvirulos es una cuenta de estudiantes de filosofía”, expresó.
Memes y militancia
Además de comunicadora y memera, Antonella se define como militante feminista. Desde su cuenta difunde memes propios y replica otros que están en sintonía con su forma de pensar política e ideológicamente. Desde el consumo de drogas hasta la libertad sexual de las mujeres y memes que repudian la violencia hacia a la mujer, hasta el uso del lenguaje inclusivo, los memes para Antonella son también una forma de militancia.
“A mí me dijeron que el meme es como el grafiti y coincido. El meme es para todes. Hay temas en los que todas las personas se pueden sentir interpeladas. Me gusta además, romper con la premisa ‘mejor no hablar de ciertas cosas’, para mí es mejor hablar, tomar postura. Porque son cuestiones que existen. Existen las personas que consumen drogas o la masturbación femenina y un montón de otros temas que son tabú”, sostuvo.
“Me pasó por ejemplo con la estigmatización de las madres solteras -siguió explicando- cuando estuvieron en auge los memes que las ridiculizan. Internet y las redes sociales representan en mucho la forma en que piensa la sociedad y me hace ruido que se rían porque hay muchas madres que tienen hijes abandonadas por paternidades irresponsables y se las llame de forma peyorativa ‘mamás luchonas’, en lugar de cuestionar a esas paternidades irresponsables. Afortunadamente es un término del que nos apropiamos y pudimos cargar de otros sentido, en nuestro favor”.
Hay temas que contra todo pronóstico son especialmente sensibles para la sociedad, en el caso de Chequea Como se Memea recibió más malos comentarios por el uso de lenguaje inclusivo que por el contenido en sí: “Hay un meme que hice, utilizando la palabra ‘xadres’ en lugar de padres, y fue un escándalo por eso, aunque tenía una foto y palabras más que provocadoras”, relató.
Un trabajo
Los memes y el tiempo que les dedica pasaron a ser para Antonella más que momentos casuales de ocio: “A mí me parece que así como existen youtubers, gamers, tiktokers y los memers, ejercemos una profesión. Muchas personas me dicen y otros memers igual, que nos agradecen por compartir desde el humor, ironizar con algunos temas. Me escribieron también varios docentes que me contaban cómo les daban un uso pedagógico a los memes. Cómo a través de los memes hubo una que me contó que les dio para hacer una tarea y les chiques tenían que explicar algo a través de memes”, contó.
“Si bien no es un trabajo remunerado, esto es algo a lo que le dedico mucho tiempo, energía, le pongo mucho amor. Estoy todo el tiempo pensando, buscando imágenes, me mantengo informada para pensar en nuevos memes. Si vos te fijás, hoy la gente desde el feed de Ig se informa en un rato de lo que está pasando. Y un meme es una síntesis, un disparador. Tenés humor, pero también puede ser como un piedrazo que te deja pensando. En una imagen con pocas palabras te dijo un montón de cosas”, concluyó.