La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró la noticia y destacó el «trabajo en equipo» que derivó en las detenciones, aunque reconoció que tuvieron «muchos problemas» y «muchas pistas falsas» durante la búsqueda de los prófugos, que se habían escapado el pasado 27 de diciembre del penal de General Alvear.
BUENOS AIRES (NA).- Tras quince días de fuga e intensa búsqueda, Christian Lanatta y Víctor Schillaci fueron detenidos ayer por la Policía de Santa Fe en las cercanías de la localidad de Cayastá, con lo que se completó la recaptura de los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez.
Luego del fallido arresto de los prófugos el sábado pasado, cuando el Gobierno informó que había capturado a los tres pero solo se trataba de Martín Lanatta, este lunes finalmente se concretó la detención de los dos delincuentes que restaban, que fueron hallados exhaustos, sedientos y fuertemente armados por dos efectivos provinciales.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró la noticia y destacó el «trabajo en equipo» que derivó en las detenciones, aunque reconoció que tuvieron «muchos problemas» y «muchas pistas falsas» durante la búsqueda de los prófugos, que se habían escapado el pasado 27 de diciembre del penal de General Alvear.
Tras comprobar su estado de salud, los condenados fueron trasladados a Buenos Aires, a los Tribunales de Comodoro Py, donde el juez federal Sergio Torres los notificó sobre los delitos cometidos durante las dos semanas de fuga, y luego fueron llevados a Ezeiza en medio de un amplio despliegue de las fuerzas de seguridad.
Ante el juez, ambos mencionaron problemas de salud: Lanatta le dijo al magistrado que no tenía bazo y que no le funcionaba un riñón, mientras que Schillaci acusó una fisura en una costilla y un fuerte dolor en el brazo izquierdo, pudo saber NA.
Además, Schillaci planteó puntualmente al juez Torres que «temía por su integridad» en el penal, por lo que pidió que se extremaran las medidas de seguridad en su lugar de detención, donde deberá cumplir su pena.
Al igual que sucedió con Martín Lanatta, capturado el pasado sábado, la defensa de los dos delincuentes pidió que el juez federal Torres quede a cargo de todas las causas que los involucran, entre ellas, la de la fuga del penal de General Alvear, ya que hasta el momento el magistrado sólo investiga si los prófugos tuvieron connivencia por parte de bandas del narcotráfico.
Pasadas las 8.00, los condenados fueron capturados en el predio de la firma arrocera Spalletti, ubicado a unos cuatro kilómetros del lugar donde el sábado pasado se produjo la primera detención. El arresto tuvo lugar luego de que los prófugos tomaran como rehén al encargado del establecimiento, quien había dado alerta a la policía local antes de llegar al lugar, por lo que pronto se presentaron allí dos efectivos santafesinos: Héctor García, de la comisaría de Helvecia, y el efectivo Bourgormer, conocido como «Bailoretto», de la seccional de Cayastá, que ya había participado en la detención de Martín Lanatta, pudo averiguar NA.
El procedimiento se hizo habitual entre varios comerciantes y trabajadores de la zona al abrir establecimientos que habían estado cerrados durante el fin de semana, ante las sospechas de que los prófugos seguían en los alrededores.
Franco fue sorprendido por los dos prófugos cuando luego de ingresar al establecimiento en un tractor lo encañonaron con armas 9 milímetros y comenzaron a ponerse la ropa que llevaba en un bolso: ante la tardanza del peón los policías García y Bourgormer entraron al predio, los condenados no opusieron resistencia y fueron apresados, sin empuñar sus armas.
A los pocos minutos arribó al lugar el ministro de Seguridad de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y poco después Lanatta y Schillaci fueron trasladados a Buenos Aires, mientras que el Ministerio de Seguridad de la Nación confirmó las detenciones al juzgado federal de Torres y al magistrado de Garantías de Santa Fe Jorge Patrici.
«Terminamos de detener a los tres prófugos que se escaparon de la cárcel de General Alvear. Tuvimos muchos problemas, muchos sinsabores, muchas pistas falsas y muchos intentos de desviar la investigación, porque en el camino hay aquellos que quieren que la Argentina siga siendo una tierra donde el narcotráfico siga manejando el poder», destacó Bullrich en conferencia de prensa junto al secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, y al ministro bonaerense del área, Cristian Ritondo.
A la vez, la funcionaria reveló que el presidente Mauricio Macri recibió la noticia «contento, pero alerta», ya que -según le dijo el mandatario a Bullrich- «ésta es solo una batalla» contra el narcotráfico.
Este lunes tras la captura de su hermano y Schillaci, Martín Lanatta se negó a declarar ante la Justicia, pero indicó que va a «colaborar en un futuro cercano», señaló el fiscal Cristian Citterio, quien está a cargo de la investigación por la fuga de General Alvear y que tiene ahora 15 días para resolver su situación procesal.
«Manifestó que no iba a declarar y que iba a colaborar en un futuro cercano y no dijo nada más que eso», resaltó el fiscal al dar información sobre la audiencia que encabezó en el penal federal de Ezeiza.
Christian Lanatta y Víctor Schillaci fueron detenidos en las cercanías de la localidad de Cayastá.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, tras la detención de los dos prófugos.