Qué es el ´triage´, el sistema que ya funciona en la guardia del Hospital para mejorar la atención de los pacientes. En el Hospital de Río Grande se atienden 250 consultas diarias y la tendencia va en aumento. Desde hace un mes funciona el nuevo sistema de asignación de turnos denominado ´triage´, que otorga prioridad, no por orden de llegada, sino según la gravedad de patología del paciente.
RÍO GRANDE.- Un ambicioso plan para reorganizar el funcionamiento de la guardia del Hospital Regional Río Grande, por el cual circulan unas 250 personas a diario, comenzó a implementarse desde hace un mes y ya comienzan a verse los primeros resultados.
La iniciativa del Gobierno para mejorar el sistema de salud en la ciudad contempla desde la construcción de la nueva guardia que se encuentra en plena obra, la reorganización de espacios en el ingreso al Hospital como el nuevo sistema de atención al paciente y entrega de turnos que se encuentra en pleno funcionamiento, hasta la incorporación de un sistema de asignación de orden de atención en la Guardia Central, de acuerdo a la gravedad y la urgencia de cada paciente.
Denominado “triage” tiene como premisa que el paciente que llega a la guardia reciba una primera atención a los cinco minutos de ingresado, donde es atendido por un enfermero que, no diagnostica, pero que sí determina -según los signos y síntomas que presenta- un color en una escala de urgencias y emergencias que finalmente definirá el tiempo de espera antes de ser visto por un médico.
Antes las esperas por una primera atención podían llevar horas, hoy los pacientes cuando ingresan son recibidos por un administrativo y luego rápidamente por un enfermero, que determinará la gravedad según una escala. En el sector, además, aparece otro personal que asiste y orienta al paciente ante cualquier duda sobre el nuevo sistema, a quien se denomina “azafata”.
“Esto le da una primera tranquilidad al paciente que llega a la guardia con angustia”, dijo a El Sureño el doctor Diego Cerrudo, secretario de Gestión Hospitalaria de la zona norte, quien afirmó que para implementar el nuevo sistema el personal de la guardia se viene capacitando desde hace un año.
“Hace un mes que implementamos en la guardia del Hospital de Río Grande el modelo de atención de pacientes por triage que consiste en seleccionar a los pacientes según los signos y los síntomas que ellos presentan mediante una escala”, detalló.
En el mundo hay cinco escalas de clasificación que se pueden adoptar: La de Canadá, la de Australia, la de Estados Unidos, la de España y la de Manchester. Esta última es la que adoptó el Ministerio de Salud para el Hospital de Río Grande.
“Es una clasificación de las más utilizadas en el mundo, cerca del 83% de los países del mundo la utilizan, y es una escala que permite una rápida adaptación a nuestro sistema de salud”, explicó el médico.
La escala de Manchester consiste básicamente en clasificar a los pacientes por sus signos y síntomas, y eso generará un color en la escala.
“Uno de los datos relevantes es que la clasificación inicial es realizada por los enfermeros, que no hacen diagnóstico, sino que se guían a partir de los signos y síntomas y disponen de un nivel de gravedad”. La escala contempla cinco colores:
– Rojo: Es el paciente de extrema gravedad, que pertenece a una emergencia. “Generalmente es un paciente que puede haber sido trasladado por bomberos, Defensa Civil o la misma ambulancia el Hospital. Entra directamente al servicio de urgencias sin hacer ningún tipo de cola, es trasladado por personal médico y va directamente al shock room del Hospital donde se evalúa su gravedad y los pasos a seguir en cuanto al diagnóstico del paciente. Este paciente de código rojo tiene espera cero”, expreso Cerrudo.
– Naranja: Es una emergencia no tan inmediata, es un paciente que hasta puede llegar a ser trasladado por un familiar o llegar por sus medios. “Este paciente reviste una gravedad, también ingresa a la sala de emergencias del Hospital y es atendido rápidamente. Si este paciente hubiese ingresado deambulando no debe esperar más de 15 minutos para ser atendido. Por ejemplo un paciente que ingresa con un dolor de pecho, acude directamente a la guardia, ingresa donde es atendido por un administrativo y rápidamente ingresará al área de triage donde el tiempo de espera para ser atendido por el enfermero no supera los cinco minutos en ningún caso”, explicó.
– Amarillo: Son pacientes que ya no pertenecen a las emergencias, sino que es un paciente que tiene una urgencia, que requiere también una rápida atención, pero que puede estar contemplada su gravedad dentro de los 30 minutos desde que fue atendido por el enfermero.
– Verde: Son aquellos pacientes que no revisten ningún tipo de gravedad. “Son pacientes que consultan por ejemplo un paciente con un corte que fue controlado y necesita ver a un médico, un paciente que tuvo fiebre hace tres o cuatro días, o vómitos. La mayoría de los casos entran en el código verde que puede esperar hasta 120 minutos”, dijo.
– Azul: Es un paciente que puede esperar hasta 180 minutos, que no requiere necesariamente de que lo pueda ver un médico. “Son pacientes que generalmente acuden a la guardia para realizarse algún tipo de aplicación con una orden médica, o que van a la guardia para controlarse la presión”, afirmó.
La adaptación del personal
El triage es un sistema que tiene tres partes fundamentales, la parte administrativa, enfermería y la parte médica. “Todo tiene que funcionar como si fuera un equipo de trabajo en una sola pieza”, afirmó el funcionario.
“Para nosotros es algo fundamental, el administrativo porque tiene que realizar la recepción del paciente, nosotros contamos con un sistema informático donde el paciente tiene su propia historia clínica digital, por eso es importante tomar los datos del paciente para luego redirigir rápidamente hacia el área de diagnóstico por imágenes o laboratorio”, señaló.
Asimismo dijo que “si la gravedad del caso es extrema no vamos a tener al paciente esperando con el administrativo sino que después se va a acercar algún familiar para poder tomar esos datos”.
Se cumple el primer mes y los resultados son acordes a lo esperado. “Tuvimos un período de adaptación de un mes donde todo el personal del servicio ha sido capacitado porque vienen trabajando con un año de anterioridad en la capacitación de los trabajadores del sistema de salud. Fuimos adaptando toda la teoría a la puesta en marcha donde seguimos manteniendo reuniones con el personal administrativo, enfermeros y médicos para poder ir ajustando este proceso de atención”.
Cerrudo afirmó que “hoy el sistema de triage está funcionando de una manera acorde, tenemos indicadores a medir en el corto plazo para ver si estamos cumpliendo con nuestros objetivos, pero principalmente este sistema de triage debido a la gran demanda que tiene el sistema de salud en las emergencias, que es un problema a nivel mundial”.
El aumento de la demanda
El triage viene a tratar de dar respuestas y resolver el aumento cada vez mayor de las personas hacia el servicio de urgencia del Hospital de la ciudad, un fenómeno que se ha convertido en una problemática mundial y que requiere de sistemas acordes para agilizar la atención.
“Esto sucede porque el primer nivel de atención no se transforma en la puerta de entrada al sistema de salud también a nivel mundial. Nosotros sabemos que también en nuestra provincia es algo que tenemos que solucionar en el futuro, volver al concepto de médico de cabecera, sobre todo aquellos pacientes que tengan alguna consulta encuadrada dentro del código verde, cuando sabemos que ese tipo de consultas pueden ser evacuadas en otros lugares del sistema de salud que no sean las guardias de los hospitales”, expresó.
En este orden precisó que “el 80% de las consultas que reciben las guardias de los hospitales son código verde, en el hospital circulan por la guardia del Hospital unas 250 personas al día. Esa es una cifra que se maneja a nivel nacional donde la problemática es la misma”.
“Las personas buscan soluciones a sus problemas de salud y saben que en las guardias hay médicos las 24 horas, los pacientes no son los culpables de ese accionar, somos nosotros los que tenemos que aplicar políticas sanitarias para que las personas puedan evacuar sus consultas sobre todo en el primer nivel de atención a través del Hospital y los centros de atención primaria”, sumó.
Al personal administrativo, enfermeros y médicos se suma la presencia de una “azafata” que cumple un rol orientador. “Implementamos un sistema de atención con un personal que funciona como azafata, recordemos que el Hospital hoy está en obra ya que se está construyendo la nueva guardia gracias a la política provincial y la toma de decisión de mejorar el sistema de salud”, manifestó Cerrudo.
“Mientras tanto nosotros decidimos implementar el triage porque necesitábamos poder contener a la población con un triage ante la gran demanda y que las personas se sientan seguras cuando ingresan al Hospital”, agregó.
Finalmente consideró que “el sistema genera tranquilidad, ya que las personas cuando ingresan al Hospital con alguna dolencia sienten angustia o ansiedad, y tener el primer contacto a los cinco minutos con algún personal de salud, en este caso el servicio de enfermería, le genera cierta tranquilidad de no encontrarse en peligro y que van a ser atendidos rápidamente por un médico”.
¿Cómo ha sido la reacción de la comunidad? “La respuesta ha sido buena, esto de implementar la azafata que los orienta y les brinda información ha sido muy interesante, no hemos tenido inconvenientes en el funcionamiento”, remarcó. “Lo que sí esperamos es seguir mejorando, este es un proceso de mejora continua y poder llegar al óptimo funcionamiento del triage y que toda la población de vaya adaptando a esta nueva modalidad y que lo tome como algo propio”, cerró.