Un contingente proveniente de Córdoba y La Pampa intentó cruzar en tres oportunidades por Chile hacia Tierra del Fuego pero el temporal y PCR positivo les imposibilitó continuar rumbo. En este contexto, la empresa que los trajo siguió viaje y los dejó varados y aislados, ahora deben regresar a su lugar de origen por sus propios medios.
RIO GRANDE.- Un viaje de distención, excursión y placer terminó de la peor forma para poco más de veinte personas que se quedaron aisladas y varadas en un hotel de Río Gallegos.
Los turistas, provenientes de La Pampa y Córdoba, venían en viaje hacia Ushuaia, donde pasarían tres noches según el tour contratado a la empresa de viajes. Sin embargo, el clima de viento durante dos días seguidos los imposibilitó de llegar a destino, por lo que debieron resguardarse en Río Gallegos.
“Compramos la excursión en octubre, no la compramos ahora con esta situación terrible de contagio y esperamos que la empresa postergará el viaje, pero no lo hizo”, relató Adriana al portal de noticias www.tiemposur.com.ar, quien aclaró que la empresa de viaje solo le pidió el certificado de vacunación completa.
En este caso, al tercer intento de cruzar por Chile con destino a Ushuaia, las autoridades de la aduana de Chile empezaron a hisopar a dos personas al azar por micro. Allí dieron con que había un caso positivo que no les permitió cruzar, por lo que fueron enviados de vuelta a Río Gallegos, donde hisoparon al contingente y encontraron 13 casos positivos.
“En La Pampa, cuando te aíslan, te llevan ropa y la vianda, acá no nos dieron nada”, manifestó la turista pampeana, quien viajaba junto a dos amigas, una de ellas siguió viaje a El Calafate y la otra debió aislarse por dar positivo de COVID y Adriana decidió quedarse a acompañarla para poder asistirla.
Adriana se mostró agradecida con el personal de salud que les ofrecieron medicamentos a los pacientes aislados para contrarrestar la enfermedad (aunque la mayoría fueron asintomáticos) y con la atención brindada por el hotel.
Aunque reclamó por la situación que atraviesan: “No tenemos seguro que nos cubra, tenemos que hacernos cargo de los gastos como hotel, comida y viaje de vuelta”.
“La empresa que nos trajo no se hizo cargo de absolutamente nada, nos dejó acá y siguió viaje”, protestó y remarcó que “es un abandono de persona terrible, nos dejaron a la buena de dios acá”.
Para ella “el desastre fue la coordinadora, que era la cara de la empresa, porque los choferes no querían seguir viaje, pero ella se impuso” y expuso que si hubieran desistido de viajar a Ushuaia ya estarían todos en El Calafate, incluso los casos positivos.
Por otra parte, Adriana señaló que el testeo que les impusieron en la Aduana fue discriminatorio porque “íbamos en tránsito, no nos íbamos a quedar en Chile” y poniendo en relieve que “en el país hoy el tránsito es libre”.
Ahora los viajeros deben encontrar un transporte que los lleve de vuelta a su hogar, con la ingrata experiencia que les dejó un viaje “seguro” en pandemia.