Empieza el frío, y es bueno recordar los peligros relacionados respecto a como se calefaccionan las casas en la ciudad. Alejandro Almaraz, director de Prensa de Bomberos Voluntarios Río Grande, conversó con El Sureño sobre algunas precauciones que conviene tener en cuenta para evitar tragedias y accidentes.
RIO GRANDE.- La principal preocupación como cada año, son las viviendas con instalaciones más precarias. Y éstas, según admitió Almaraz, están mayormente en la zona de la Margen Sur. Esta semana ya hubo una vivienda completamente destruida por el fuego. Desde Bomberos, recuerdan una vez más, la importancia de prestar debida atención para evitar tanto incendios, como intoxicaciones por pérdidas de CO (monóxido de Carbono) dentro de las casas.
“Hay un par de recomendaciones más en ese barrio sobre todo, que no llegan los servicios en condiciones para que sea confortable la vida de los vecinos. Y lamentablemente hay muchas cuestiones políticas que hacen que la gente no pueda tener sus terrenos, su casa, y menos los servicios básicos. Cuando uno va solicitar los servicios a la Cooperativa, o a Camuzzi, necesita tener planos, hay todo un detrás de que pase un incendio o un accidente”, reconoció Almaraz.
Y agregó: “El tema es que por ahí quedan expuestas las familias que no tienen el gas como corresponde, o las instalaciones, la electricidad es muy peligrosa, las casas son precarias, ante un mínimo incendio, y por ahí en invierno no tanto, pero hay días que son muy ventosos, y eso complica también la labor de bomberos, porque es una propagación muy rápida la que tiene, las viviendas a parte están muy cerca una de otra. El incendio de ayer fueron dos viviendas prácticamente, una en un 80% y la otra un 10, pero una vivienda se ve afectada por otra muchas veces”.
El Bombero, además, reconoció que es inevitable dadas estas circunstancias, buscar métodos alternativos para calefaccionar la vivienda, pero recordó: “Cuando uno se calefacciona de esa manera hay que tener mucho cuidado en el sentido de los tirajes que estén como corresponde, para que pueda exhalar el humo que elimina ese producto como leña, de un brasero, una salamandra. Si bien acá no es tan común, pero sin ir más lejos Chile, muchos se calefaccionan de esa manera. Con braseros, salamandras, y ellos periódicamente tienen que hacer limpiezas de los conductos porque si no sufren incendios muy frecuentes. Hay que tener esos cuidados, no sólo en la forma de calentar la vivienda, sino en el mantenimiento”, recalcó.
En cuanto al CO, Almaraz recalcó que muchas veces, una vivienda puede alcanzar niveles peligrosos de este gas, mucho más rápido de lo que se cree: “Esa es una medición que se hace en partes por millón. Nosotros tenemos detectores de monóxido y de gases, que pueden verificar muchas veces. En las viviendas comunes uno tiene un nivel de monóxido permitido que no nos afecta. Además quizá una ventilación en el día, abrimos las puertas y las ventanas, un día lindo y eso ya desaparece. Hay que ver la cantidad de monóxido que está saliendo, como tenemos hecha la ventilación. Ahora si hay porcentajes grandes de monóxido de carbono, el tiempo es mínimo. Muchas veces tenemos que tener una ventilación, en la habitación, abrir una ventana. En invierno en más difícil, pero quizás aprovechar el momento del día en que la temperatura sube, y no se siente tanto el frío, conviene abrir una ventana y dejar que corra el aire”, recomendó.
El director de prensa de Bomberos, reconoció que durante el año pasado hubo muy pocas emergencias relacionadas con contaminación por CO: “Vemos que la gente ha tomado un poco de conciencia. Tratamos de hacer campañas, tanto Bomberos Voluntarios como Defensa Civil. El año pasado demás, pudimos junto a Gobierno entregar detectores de gas para muchas viviendas para que sean alertados. Lo que sí nos llamó la atención es que casi llegando a fin de año cuando los días se ponen más lindos y uno puede abrir las ventanas y aprovechar las horas de luz y calor, tuvimos más intervenciones que en el invierno. Que es la época en que uno utiliza más calefacción. Y casi a fin de año tuvimos que participar de dos intoxicaciones por monóxido de carbono de una familia completa, que tuvo que ser derivada a la ciudad de Ushuaia, afortunadamente ninguna de las personas tuvo consecuencias a la salud, pero nos llamó la atención que se dio en un momento que no es habitual por las condiciones climáticas de la ciudad”, detalló.
De todos modos, nuevamente, Almaraz insistió en la necesidad de tomarse el tiempo y el trabajo de revisar las instalaciones en la vivienda: “En este momento que empieza el frío y ya se sienten las bajas temperaturas, hay que tener cuidado. Todavía creo que estamos a tiempo de hacer una revisión de los calefactores, una limpieza. Que busquen un gasista matriculado. Tanto las prestadoras del servicio de gas como de electricidad, tienen un listado de matriculados. Porque un poquito de inversión en la parte de gas o de electricidad, para revisar las instalaciones, puede evitar a futuro un accidente, un incendio”.
Y concluyó: “Un incendio muchas veces dura cinco minutos, y puede terminar con una vivienda construida en muchísimos años, así que habrá que tomarse un poquito de tiempo, un poquito de habrá para hacer los servicios de revisión, y nos podría salvar hasta la vida”.