RIO GRANDE.- El oficial de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, Santos Santillán, se encadenó ayer por la tarde a la sede local del Juzgado Federal, reclamando por su situación laboral dentro de la fuerza, asegurando ser víctima de persecución en razón de una investigación iniciada.
“El hostigamiento de la Policía de Seguridad Aeroportuaria hacia mi persona no es de hoy sino desde hace ocho años. El año pasado llegamos a un acuerdo de que iban a respetar mis derechos y trasladarme deTierra del Fuego, sin embargo en 2014 realicé un informe de inteligencia criminal que lo presenté a mi jefe, quien se negaba a recibirme el informe, y finalmente se aceptó y se recibió el informe de 10 de junio del 2014 sobre trata de personas y a partir de ese día empezó mi calvario”, señaló.
Santillán agregó “el 21 de octubre de 2014, el señor fiscal federal Marcelo Rapopport sale a decir en los medios lo que decía mi informe que era veraz, pasado un tiempo la señora jueza le ordena al fiscal realizar los allanamientos en los lugares que yo digo, y dio positivo rescatando a cinco personas”.
“Desde ese momento empezó la persecución del oficial Espinoza, no sé si por orden de alguien de arriba o por él, y me suspendieron mi sueldo desde hace cinco meses, yo tengo cuatro hijos”, dijo el oficial asegurando que no le permiten reintegrarse a su actividad en la actualidad.
En razón de ello radicó una denuncia “al señor Espinoza, la PSA, la ART Provincia y la Superintendencia de Seguros”, señaló el uniformado en su singular protesta.