Desde el viernes estaban instaladas en un departamento ubicado en Viedma al 500, en el barrio Mutual. Aparentemente un calefactor funcionaba mal y fue el detonante de la emergencia. Las dos personas fueron derivadas al Hospital Naval Ushuaia.
RIO GRANDE.- La emergencia se produjo ayer por la mañana en un departamento ubicado a los fondos de calle Viedma 535, donde una mujer y su hija de 7 años debieron ser asistidas, desvanecidas por un escape de monóxido dentro de la vivienda.
La mujer identificada como Cristina Valeria Olivera de 30 años, junto a su hija de 7 años, desde el viernes alquilaban en el lugar el departamento por lo que estuvieron todo el fin de semana con las labores de la mudanza.
Ante ello el sábado Olivera advirtió a su madre que iba a estar cansada y se recostaría, por lo que no resultó extraño para la familia que no respondiera los mensajes.
Ya en la mañana de domingo esta situación resultó llamativa para el padre de la mujer quien se dirigió a la vivienda, donde observó por una ventana que estaba entreabierta, que madre e hija estaban desvanecidas.
Inmediatamente puso a ventilar la vivienda previa llamada a las unidades de emergencia que llegaron al lugar inmediatamente para asistirlas, quienes fueron conducidas al hospital, y luego mediante cordón sanitario, derivadas a Ushuaia.
Allí en el Hospital Naval fueron asistidas en cámara hiperbárica, evolucionando positivamente Olivera, quien quedó internada en observación; mientras su hija retornaba al caer la tarde de ayer para quedar internada en Terapia Intensiva Pediátrica.
Pedido a Salud
Anoche la familia de las dos pacientes velaban por su salud en el Hospital Regional Río Grande, donde Mónica, madre y abuela de ellas, señaló: “Gracias a Dios estaba la ventana abierta porque si no, nos encontrábamos con otro panorama”, dijo respecto de que se presume que ambas víctimas estuvieron desvanecidas desde el sábado.
En ese sentido personal de Camuzzi habría determinado que en el departamento solo estaba encendido un calefactor que en su mal funcionamiento habría intoxicado el ambiente.
Tras el periplo de internación y derivación, Mónica señaló que “ahora estamos viendo si quedan secuelas, nos dijo la doctora que hay que esperar ver cómo evoluciona de los riñones, pero algo muy importante para pedir a la Gobernadora para que se consiga una cámara hiperbárica en Río Grande, porque no puede ser lo que tuvimos que pasar, mi hija tuvo la suerte de llegar a tiempo pero es algo muy necesario para Río Grande”, dijo respecto del viaje de ida y vuelta ayer a Ushuaia.
Finalmente la familia de las víctimas señaló el “agradecimiento a las personas que nos llevaron en las ambulancias a Ushuaia, a los bomberos y demás unidades de emergencia”, dijeron emocionados.