Una botella de vino que pasó poco más de un año en una Estación Espacial Internacional ahora podría cotizar en hasta un millón de dólares.
Se trata de una camada de vinos Pétrus 2000, considerados de alta gama, que se usaron para un experimento científico y que ahora serán subastados. Según los especialistas que testearon los resultados, el vino maduró de una forma única gracias al entorno de gravedad cero en el que permanecieron 14 meses.
En total, hay unas 12 botellas que ahora serán rematadas. Todas ellas fueron enviadas en noviembre de 2019 al espacio, con la idea de establecer el potencial de la agricultura extraterrestre. Así lo informó la casa de subastas Christie’s, que ahora ofrecerá cada uno de estos vinos en un precio que podría alcanzar el millón de dólares.
La empresa espacial privada Space Cargo Unlimited puso el vino en órbita en noviembre de 2019 como parte de un esfuerzo para hacer que las plantas de la Tierra sean más resistentes al cambio climático y las enfermedades al exponerlas a nuevos factores de tensión. Los investigadores también quieren comprender mejor el proceso de envejecimiento, la fermentación y las burbujas en el vino.
Las ganancias de la venta financiarán futuras investigaciones de Space Cargo Unlimited. Otras botellas de la docena que fueron al espacio permanecen sin abrir, pero no hay planes de venderlas.