BUENOS AIRES (NA).- Invitado por su par brasileño, Michel Temer, el presidente Mauricio Macri realizará una visita de Estado a Brasil el 7 de febrero próximo.
La invitación fue cursada este miércoles por el presidente de Brasil durante una comunicación telefónica que el mandatario argentino recibió en su despacho de la Casa Rosada, se informó oficialmente.
Será el segundo encuentro entre ambos presidentes luego de que Macri recibiera a Temer el 3 de octubre pasado en la residencia de Olivos, aunque en esa ocasión no se trató de una visita de Estado.
En esa reunión, los mandatarios destacaron sus coincidencias sobre la necesidad de profundizar la relación bilateral y “fortalecer el Mercosur”, además de su “preocupación” por la crisis política y económica en Venezuela, entre otras cuestiones.
Los dos presidentes se reunieron en Olivos junto a los cancilleres de Brasil, José Serra, y de Argentina, Susana Malcorra, y en ese marco firmaron convenios comerciales para incentivar las Pymes.
La visita de Estado a Brasil es la primera con fecha determinada, dado que la semana pasada el Gobierno dejó trascender un primer boceto de la agenda internacional del Presidente para 2017 en el que se anotaron varios destinos pero sin días precisos.
En ese contexto, se informó que el mandatario tiene un viaje confirmado también en febrero a España, donde se reunirá con su par ibérico, Mariano Rajoy, para mantener una reunión bilateral en el Palacio de la Moncloa.
Un mes más tarde, en marzo, Macri viajará a la ciudad de Ámsterdam para reunirse nuevamente con el primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, con quien había mantenido un primer encuentro en Davos en enero de 2015.
En tierra neerlandesa, el Presidente aprovechará para volver a juntarse con el rey Guillermo y la reina Máxima de Holanda, con quienes tiene muy buena sintonía.
En mayo la agenda presidencial ya tiene reservado un espacio para las visitas que realizará el líder del PRO al Lejano Oriente: Japón y China serán los destinos.
Macri devolverá así el gesto que tuvo el primer ministro nipón, Shinzo Abe, al visitar la Casa Rosada en noviembre pasado, tras 57 años sin una reunión bilateral con un mandatario japonés en suelo porteño.
